Ayer miércoles, los precios de los granos volvieron a cerrar rojo, con el maíz llevando la peor parte, de la mano de nuevos datos de producción de etanol, que abrieron el fuego en la operativa diurna. En los mercados accionarios, el Dow cayó, a causa de las bajas en las ventas minoristas y de producción industrial. Los energéticos volvieron a retroceder debido al crudo y sus derivados.

El maíz siguió sufriendo por culpa de los fundamentos del etanol, el que volvió a mostrar una caída vertical en la producción semanal, 15%, ante la desaparición de la demanda en Estados Unidos reflejándose en inventarios sin precedentes. Esto activó ventas técnicas, provocando caídas en torno al 2% frente al cierre del martes.

La soja volvió a caer, asociado al desplome en la demanda como alimento forrajero. Sin embargo, cerró por encima de los mínimos consiguiendo volver a sostenerse ante intentos de bajas mayores. La Asociación estadounidense de Procesadores de Soja – NOPA, por su sigla en inglés – publicó los datos correspondientes a marzo, resultando el mes de mayor volumen molido desde que se llevan registros, superando el techo del rango de expectativas del mercado. Las importaciones de harina de soja por la Unión Europea, mientras tanto, muestran un aumento de 4% en los últimos 12 meses.

El trigo bajó, continuando con la tendencia de debilidad en una nueva rueda de ventas técnicas. Los precios vieron un aumento interesante durante las últimas semanas, en base a compras de pánico por parte de los países importadores así como cuotas autoimpuestas por los países exportadores. Los inventarios mundiales y en Estados Unidos se ven muy altos, con un consumo lento.

Fuente: Valor Agro.