Algunos agricultores brasileños de soja del estado de Goiás han decidido detener las ventas de la actual cosecha, apostando por una mejora de los precios debido a las pérdidas de producción observadas en algunas partes del país.

Goiás es una de las tres potencias agrícolas en la región centro-oeste de Brasil, junto con Mato Grosso y Mato Grosso do Sul. Es el cuarto mayor productor de soja del país y se espera que allí se cosechen 11,3 millones de toneladas de oleaginosa. Pero partes del estado, particularmente en el sur, fueron golpeadas por un período seco en diciembre que dañó los campos.

“Como hemos escuchado de algunas pérdidas significativas, hemos decidido esperar a que los precios mejoren”, dijo Murilo Monteiro, quien planta soja y maíz en 680 hectáreas en los municipios de Jataí y Serranópolis, en Goiás. Los rendimientos generales en sus campos hasta ahora están alrededor de un 10% por debajo del año pasado, con un promedio de 62 sacos (60 kg) por hectárea, agregó.

Los agricultores ya han vendido alrededor del 50% de la producción, ya que muchos acuerdos se cerraron en la segunda mitad del 2018 en medio de la ola de compras de China, ya que la disputa comercial con Estados Unidos impulsó la demanda por la soja brasileña.

Fuente: Reuters