La consultora holandesa Rabobank espera una volatilidad continua en los precios de la carne de cerdo, ya que la interrupción en los mercados locales se equilibra con la escasez de productos en Asia.

En su segundo informe mensual, el analista de proteínas animales de Rabobank, Christine McCraken, sostuvo que “los efectos combinados de la destrucción de la demanda a corto plazo y las interrupciones de procesamiento debido a restricciones laborales por la Covid-19 generó una volatilidad considerable en los mercados, debilitó los retornos de los productores y frenará el crecimiento de la producción. Un crecimiento más débil del Producto Interno Bruto (PIB) podría presionar aún más la demanda de carne de cerdo, agravando un entorno operativo ya desafiante”.

En el marco del informe que publicó Eurocarne, se establece que los mercados mundiales de carne de cerdo también están fuertemente influenciados por los efectos de la peste porcina africana (PPA). Si bien la Covid-19 afecta la cadena de suministro de carne de cerdo en todos los rincones del mundo, la primera de las enfermedades citadas, sigue siendo el factor clave para varias regiones que continúan experimentando brotes en sus rebaños comerciales. Los efectos de la pandemia del coronavirus están monopolizando la atención en todos los mercados de carne de cerdo en este momento, y esto continuará durante al menos el próximo trimestre., remarcó la consultora.

Tanto la producción como el consumo de carne suina están siendo restringidas por la pandemia y el suministro genera mayor incertidumbre.

Al mismo tiempo, la peste porcina africana continúa presionando la producción de cerdo en Asia y algunas partes de Europa. Como Asia es la principal región importadora de carne de cerdo.