Cuando la situación en Rusia empezó a dilatarse, este país redireccionó sus compras de alimentos como represalia ante las sanciones impuestas por Occidente debido al conflicto bélico en el este de Ucrania. El gobierno de Vladímir Putin anunció la suspensión de la importación de buena parte de los alimentos adquiridos en la Unión Europea, Estados Unidos, Australia, Canadá y Noruega, y entabla negociaciones con otros proveedores —fundamentalmente en América del Sur— para procurar no sufrir el desabastecimiento y evitar dentro de lo posible la suba en los precios internos.

Paraguay fue uno de los países beneficiados, al principio, con este bloque; teniendo en cuenta que es el principal destino de las exportaciones de carne bovina. Así también, a raíz de los problemas de Rusia la carne de cerdo se volvió un interesante producto de exportación a la Federación Rusa y los precios ascendieron considerablemente, si bien es cierto que los volúmenes de exportación fueron disminuyendo a raíz que se acentuaban los problemas económicos de Rusia.

DISMINUCIÓN EN VOLUMEN
“La situación en Rusia va a afectar innegablemente, teniendo en cuenta que es el principal mercado comprador. Afecta económicamente, ya que a raíz de esto se reducirá el volumen de compra ya que hay gastos suntuarios que son los primeros que se recortarán en cualquier economía.
Vamos a ver que necesariamente va a bajar el volumen de compras y eso hará que el mercado tenga que ajustarse, el mercado de la carne es tal vez uno de los más dinámicos y sabe encontrar otros mercados y está generando oportunidades de nuevos destinos de exportación e internamente también el producto se comercializa a muy buen precio. Este mercado, si bien va a sufrir, va a poder ajustarse prontamente de la mejor manera”, explicó el analista económico Christian Borja.
La industria cárnica posee gran peso en la actividad económica del Paraguay. La producción de carne constituye el subsector más importante dentro del PIB industrial. Actualmente en cuanto a los alimentos, se destaca la leve baja de precio (en promedio) verificada en los cortes cárnicos. No obstante, los cortes tradicionales y que son masivamente consumidos en el último mes del año continuaron registrando incrementos en sus precios.
Además se ha verificado un incremento en el ritmo de faenamiento de las industrias frigoríficas locales, traduciéndose en un aumento de la oferta de cortes vacunos con destino al mercado local.
“Sin duda alguna el mercado de la carne va a buscar nuevos destinos para paliar ese caso. Directamente la experiencia demuestra la capacidad de reinvención que tiene el mercado de la carne.
Actualmente hemos visto que Venezuela va a empezar a requerir más carne y este es un buen ejemplo de nuevos mercados, también están los mercados chilenos y otros que se van a ir abriendo y con toda seguridad serán muy apetecibles para el mercado de la carne. Están Ecuador y Colombia, además de muchos otros que requerirán nuestra carne y que si bien es cierto, no van a estar en el tamaño que tiene Rusia, pero irá creciendo la cantidad de mercados”, observó Borja.

SITUACIÓN RUSA
El fantasma de la crisis de 1998 ha dejado de ser tal para convertirse en una realidad que amenaza con arrojar a la economía rusa a un colapso aún peor al que soportó ese país hace 16 años.
DESPLOME DEL RUBLO
En menos de tres semanas, el rublo se ha desplomado casi un 50% frente al dólar, pasando de unas 50 unidades a alrededor de 75 por billete verde, empujado por la caída del precio del petróleo, la fuga de capitales y la creciente recesión económica.
El descuido de Rusia por años de las inversiones y la reforma apuntaban a una crisis inevitable. En 2014, la crisis llegó en dos frentes. El primero de ellos en la confrontación con Ucrania desde principios de año y las sanciones resultantes, y luego con el colapso increíble en los precios del petróleo en los últimos meses. Rusia y sus ciudadanos han estado aquí antes y conocen la rutina. Todo se ve terrible en el momento, pero como dice el viejo refrán, los tiempos de crisis son también momentos de máxima oportunidad para trazar un nuevo rumbo, según publica El Economista de México.
Se destaca además que el desplome del rublo afecta en los precios pagados por la carne en el Paraguay, y las exportaciones de carne a la Federación Rusa se verán retraídas en los meses de diciembre y enero, retomando nuevamente con más fuerza durante marzo y abril a raíz del congelamiento del puerto de San Petersburgo.
Los frigoríficos paraguayos están aprovechando el bajón del mercado ruso para completar la cuota de 800 toneladas que ofrece Taiwán. Para 2015, el cupo de Paraguay para ingresar en condiciones arancelarias preferenciales con Taiwán trepará a 1.800 toneladas

Fuente: 5 dias