Productores agropecuarios minimizaron el impacto de la determinación del Gobierno argentino, de eliminar las retenciones a casi todos los rubros agropecuarios, salvo a la soja, caso en el que redujo el porcentaje de 35% a 30%.

El presidente de la Cámara Paraguaya de Exportadores y Comercializadores de Cereales y Oleaginosas (Capeco), José Berea, consideró hasta positivo que se diera este paso, ya que sostuvo que esto comprueba que el agro no debe tener una carga impositva diferenciada, y agregó que si le va bien a Argentina, como bloque (Mercosur), a la región le puede ir bien y se podrá continuar con el posicionamiento del Mercosur como granelero del mundo.

Descartó que Paraguay pierda mercados con la recuperación que el sector agrícola argentino pueda tener a raíz de las medidas adoptadas por Mauricio Macri. Dijo que los productos argentinos nunca dejaron de tener presencia a nivel internacional, aunque sí a mayores costos.

Por su parte, Korni Pauls, titular de la Cámara Paraguaya de la Carne, señaló que ya esperaban que se diera esta medida, ya que esta había sido una promesa del candidato, ahora presidente de la Argentina.

Apuntó que a corto plazo no tendría un efecto en las exportaciones, salvo alguna mayor penetración en Chile, pero sin mayores inconvenientes. No obstante, destacó que el sector cárnico local deberá seguir trabajando en incrementar los niveles de productividad y potenciando las ventajas que tiene Paraguay, como el atractivo del engorde de ganado a pasto, que tiene un mercado mundial creciente. Remarcó que el trabajo en la marca país tiene que continuar en la misma senda.

“Vamos a tener que lidiar nuevamente con un jugador más en el mercado, pero tomamos esto con mucha calma, pues la recuperación del sector cárnico argentino no se daría de la noche a la mañana, sino que se daría entre 3 a 5 años”, indicó.