Guillermo Crampet | Valor Agro
Sin imaginar, Paraguay quedó en una posición más que privilegiada para la exportación de carne bovina a Estados Unidos, con la reciente imposición de aranceles de Trump a Brasil, hecho que prácticamente lo elimina del mercado norteamericano.
Y esto no es solo por las opiniones de operadores nacionales, sino que otros proveedores del Mercosur aseguran que las oportunidades se abren para el resto de los países (Argentina, Uruguay y Paraguay) pero entienden que el mayor beneficiado podría ser el complejo cárnico de Paraguay.
A corto plazo, Paraguay deberá jugar en condiciones similares a las de Argentina y Uruguay, pagando un 36,4% de arancel. Sin embargo, a mediano plazo, Paraguay podrá gozar de la cuota de terceros países prácticamente a placer, un aproximado de 65 mil toneladas libre de arancel y que hasta este año Brasil utilizaba el 95% del total.
“Paraguay está frente a una gran oportunidad”, destacó el presidente del Senacsa, José Carlos Martín Camperchioli, en Valor Agregado Radio.
Si bien Martin Camperchioli entiende que el conflicto político-comercial entre Estados Unidos y Brasil debería ir encontrando soluciones antes del 1 de enero, si no sucede Paraguay podría hacer un uso superior de la cuota de terceros países y ser más competitivos en relación a las ventas de Argentina y Uruguay que tienen contingente exclusivos de 20 mil toneladas cada uno.
Paraguay tiene competencia de otros proveedores de carne dentro de la cuota de terceros países, que seguramente también tomarán posiciones, pero actualmente esa participación no supera el 1% del total de las 65 mil toneladas.
En una cuota para jugar prácticamente solo, Paraguay tendría menos presión y podría distribuir con comodidad ese cupo cárnico durante el año con un beneficio arancelario interesante.
Para graficar las presiones de mercados, tradicionalmente Brasil ocupaba esa cuota en los primeros 4 a 5 meses del año, sin embargo en 2024 lo hizo antes de marzo y en 2025 la completó en la tercera semana de enero; por tanto Paraguay exportó el mayor porcentaje de unas 20 mil toneladas por fuera de la cuota y pagando el arancel del 26,4%.
“Si no hay soluciones entre ambos países, podemos aprovechar esa cuota de mejor forma y circunstancialmente nos posiciona mejor que Argentina y Uruguay”, remarcó el Presidente del Senacsa.
Entre enero y junio del 2025, Brasil exportó 181.477 toneladas de carne bovina a Estados Unidos, a un valor promedio de US$ 5.732 por tonelada (una facturación mayor a 1.000 millones), siendo el tercer destino en importancia después de China y Hong Kong.
Brasil aumentó 102% los ingresos y 112,6% el volumen de carne enviada al país liderado por Trump versus los primeros seis meses del año pasado.
Para hacer algunas comparativas, ese volumen en Estados Unidos, representa prácticamente toda la exportación de carne de Paraguay en la primera mitad del año.
El presidente de la Asociación Brasileña de Industrias Exportadoras de Carne (Abiec), Roberto Perosa, dijo este miércoles a la noche en una conferencia de prensa a la que accedió Valor Agro que son optimistas de una recuperación del mercado: “Tenemos esperanzas de que Brasil pueda retomar las exportaciones a Estados Unidos, siempre y cuando sea una relación ganar y ganar”.
Al mismo tiempo, indicó que esos volúmenes de carne y un producto tan específico que se enviaba a Estados Unidos serán difíciles de reubicar en otros mercados y consideró que el mercado interno será una de las principales opciones.
Perosa confirmó que Estados Unidos es un cliente que se pierde, un mercado “altamente rentable”, que “paga bien” y tiene “mucha demanda”.
Mirando la segunda mitad del año, Paraguay tiene el desafío de cumplir el objetivo exportador de las 50 mil toneladas en 2025, donde en el primer semestre estuvo muy cerca de completar el 50% de ese volumen.
Desde el Senacsa se espera que Paraguay pueda mantener niveles de exportación por encima de las 6000 toneladas al mes, especialmente desde septiembre hasta el cierre del año.
Un hecho que podría amortiguar los impactos de presión de Brasil en otros mercados comunes con Paraguay y posiblemente haga traccionar al alza, aún más, el valor medio de la tonelada de carne y el precio del ganado para faena.
Los vientos soplan diferentes para la ganadería en Paraguay, las coyunturas se alinean y el clima acompaña para disfrutar de un escenario optimista, desde la óptica de propios y extraños.