La Asociación Paraguaya de Productores y Exportadores de Carne (Appec), ha reafirmado su compromiso con la sanidad animal al recordar que Paraguay está por cumplir 15 años libre de fiebre aftosa, logro atribuido a una política sanitaria responsable basada en la vacunación.
La APPEC rememoró el brote de fiebre aftosa ocurrido en 2011, que provocó un colapso del precio del novillo del 40 %, cayendo de 4,36 USD/kg a 2,44 USD/kg en pocos días. Esto representó pérdidas millonarias para miles de productores del país.
“Un nuevo brote podría costar más de US$ 1.000 millones al sector productivo y el único que asume ese riesgo es el productor”, advirtieron desde el gremio.
Por ello, se oponen firmemente a cualquier iniciativa de levantar la vacunación, calificándola como una medida que expondría innecesariamente al país y al productor.
Argumentan que la vacunación es la única garantía real de seguridad sanitaria, esencial para la estabilidad económica y la confianza en los mercados internacionales.
En redes sociales, sintetizan su postura con un mensaje contundente. “Vacunar es proteger a la ganadería. Vacunar es cuidar al Paraguay”.
