El productor ganadero Silfrido Baumgarten habló sobre el impacto de la sequía prolongada en el departamento de San Pedro, donde la falta de lluvias, junto con incendios y precios desfavorables, ha obligado a los ganaderos a recurrir a forraje adicional, algo inusual en la región que también ha reducido considerablemente el hato ganadero. A su vez destacó la disminución de terneros en estos servicios y la expansión agrícola y forestal.
Comentó que se registraron lluvias en San Pedro Norte y Concepción, aunque persiste un déficit hídrico. Señaló que se está atravesando una de las peores sequías en los 41 años que lleva en el departamento de San Pedro, sin precedentes en cuanto a su duración.
Indicó que hace 13 meses se mantiene el déficit de lluvias, lo que ha obligado a muchos productores a recurrir a fardos u otro tipo de forraje, una situación inédita en San Pedro. “Este año se dio esa necesidad, acompañada de incendios como ocurren en toda sequía. Además, los precios no acompañaron, así que esperamos para estos días mejores precipitaciones. La temperatura y el pasto están despertando, pero hasta ahora no se han tenido lluvias suficientes para acumular agua en los tajamares”, contó.
Agregó que este 2024 ha sido uno de los años más difíciles, no solo desde el punto de vista climático, sino también en términos de precios. Explicó que los ingresos que se están recibiendo de los frigoríficos no reflejan los precios internacionales, lo cual afecta directamente a los productores ganaderos.
Respecto al hato ganadero en San Pedro, indicó que en la última vacunación se evidenció una tendencia que comenzó hace más de 10 años con el ingreso de la agricultura. San Pedro, que en ese entonces era el segundo departamento con mayor cantidad de ganado, alcanzaba más de 1.750.000 cabezas.
“Ahora, con esta última vacunación, se cerró con 1.280.000 cabezas, 100.000 menos que Concepción, que ha crecido. El presidente Hayes sigue liderando en cantidad de cabezas, seguido por Fuerte Olimpo, Boquerón y, en cuarto lugar, San Pedro”, apuntó.
Explicó que esta situación se debe principalmente a la expansión de la soja y, en el último año, al desánimo de muchos hacia la ganadería. Destacó además el avance de la forestación, especialmente en la zona limítrofe con Concepción.
“Estimo que el stock ganadero seguirá disminuyendo. Concepción estaría casi alcanzándonos, aunque también se está expandiendo bastante la forestación. De todas maneras, no creo que el hato aumente; al contrario, habrá menos producción de terneros por la sequía que se tuvo el año pasado, y para el 2025 será peor”, precisó.
En relación a este punto, agregó: “Como las vacas comenzaron a preñarse muy tarde , están pariendo fuera del período de servicio. Esto traerá como consecuencia menos preñeces este año, y los terneros que nacerán en el 2025 serán muchos menos”.
Señaló que todo depende del clima y que, aunque se acerca noviembre, aún no se cuenta con pasto suficiente para que el ganado recupere peso y las vacas vuelvan a preñarse. También mencionó que la parición de terneros ha sido tardía debido a la sequía del año pasado.
“Los terneros, que normalmente nacen en agosto y septiembre en San Pedro, están naciendo a fines de octubre y noviembre. Esto reducirá las posibilidades de recuperación para preñarse nuevamente, con una disminución en la cría de terneros en San Pedro y Concepción de entre 15% y 20%”, apuntó.
Finalmente, insistió en la necesidad de establecer una mesa de diálogo con los industriales, señalando que debe existir una colaboración entre ambos sectores. “Si bien son sectores separados, no puede uno imponerse sobre el otro, porque lo único que podría ocurrir es que, en el futuro, se queden sin materia prima para sus industrias”, concluyó.