El presidente de la Asociación Paraguaya de Productores y Exportadores de Carne (Appec), Fernando Serrati, aseguró que el productor no tiene expectativas de que el actual escenario de la ganadería vaya a mejorar. “Es lo peor que puede pasar en una actividad”, indicó.
Serrati estimó que, una vez conocido el resultado de la vacunación que comienza el 24 de enero, el stock vacuno del país registrará una baja en el entorno de las 700 a 800 mil cabezas en los últimos dos años, desde 2020 a la fecha. “Creemos que pasa porque el productor está perdiendo dinero y se ha desmotivado”, aseguró en una entrevista con el diario ABC.
Explicó que el precio que hoy reciben los ganaderos está muy por debajo del valor de principios de 2022, cuando en enero se posicionó en US$ 3,78 a la carne.
Según la Comisión de Carne de la Asociación Rural del Paraguay (ARP), la referencia del macho en noviembre se ubicó en US$ 3,26, lo que implicó una desvalorización anual del 13,6% en relación al periodo enero a noviembre del 2022.
“El coste juega un papel preponderante, es la principal clave del negocio, al vender al costo o debajo del costo el negocio fracasa. Es lo que expresamos con los números, a esto se suma la pérdida de stock y una caída en la faena nacional”, señaló en la entrevista.
En tal sentido, el Presidente de la Appec aseguró que “si no trasladamos los precios internacionales o los precios locales que la industria percibe, si no entendemos que todos debemos ganar, si no entendemos que debemos estar en todos los mercados, especialmente en China; si no logramos tener un instituto de la carne que estudie mercados y de transparencia; no saldremos de esta coyuntura”.
Por tanto, agregó: “Hago un llamado al gobierno nacional para que intente mediar esta situación, para que no nos pongamos restricciones para ir por los mercados más importantes, hago un llamado a la Cámara Paraguaya de la Carne para que analicemos esta grave, penosa y lamentable situación en que está la producción nacional. Es hora de hablar y de escucharnos. Estamos a tiempo”, apuntó.
Serrati consideró que el hato bovino podría recuperar las 800 mil cabezas perdidas e incluso crecer más, pero “falta la mirada con ese objetivo, que todos pensemos lo mismo como lo hicimos hace 20 años y esto cambiará rápidamente”.
Contó que en 2004 el país tenía un rodeo de 7 millones de vacunos, y en 2020 se alcanzaron los 14 millones. “Está demostrado que podemos crecer, no veo impedimento alguno”, cerró.
