Frente a la propuesta de suspender la inmunización, el gremio ganadero considera que no existen, hoy en día, condiciones ni beneficios comprobables que justifiquen asumir un riesgo que podría poner en jaque décadas de esfuerzo sanitario y comercial.
Esta decisión, calificada de “firme y clara”, fue destacada por Martín Filártiga, secretario general de la ARP y presidente de la Regional Central Chaco, en Valor Agregado, Radio Asunción por la 1250AM.
Filártiga explicó que la ARP no considera prudente asumir el riesgo de suspender la vacunación. “Mientras no veamos beneficios concretos para el estado de libre sin vacunación, en lo comercial, no vemos la necesidad de asumir ese riesgo por más mínimo que sea”, afirmó.
Esta postura se basa en la convicción de que, aunque la sanidad del país es sólida, los posibles riesgos de un brote superan con creces los supuestos beneficios. Un cierre de mercados, en caso de un brote, sería “letal” para el sector ganadero paraguayo.
El dirigente ganadero enfatizó que “la pata sanitaria no es el único factor para considerar. A la fecha, no existen señales claras de mercados que ofrezcan un beneficio tangible por cambiar el estatus sanitario. Si bien se especula sobre una mayor penetración en mercados de carne con hueso, no hay nada concreto que justifique el riesgo.”
Filártiga citó el ejemplo de Uruguay, que, “con su estatus de libre de aftosa con vacunación, exporta lengua a Japón, uno de los mercados más exigentes a nivel mundial”. Este hecho, según el vocero, es una prueba de que un estatus sanitario con vacunación no limita el acceso a mercados de alta exigencia.
En consecuencia, la ARP seguirá priorizando la seguridad y la estabilidad comercial del sector, manteniendo la vacunación como pilar de su estrategia sanitaria.
