El gobierno de Brasil se encuentra a un paso de lograr uno de sus mayores avances comerciales en el sector cárnico de los últimos años: el acceso al mercado japonés para la carne vacuna brasileña.
El ministro de Agricultura y Ganadería, Carlos Fávaro, aseguró que las negociaciones están “muy avanzadas” y que solo faltan detalles técnicos del protocolo sanitario para concretar la apertura, prevista para finales de 2025.
“Se está avanzando con rapidez. Algo que estuvo en suspenso por más de 25 años está muy próximo a concretarse”, señaló Fávaro en declaraciones a Bloomberg desde Malasia.
Japón es uno de los mercados más exigentes y de mayores ingresos del mundo, caracterizado por altos estándares sanitarios y una estricta trazabilidad. La habilitación de Brasil supondría una expansión estratégica para el mayor exportador global de carne vacuna y una competencia directa para Estados Unidos y Australia, los actuales proveedores predominantes del archipiélago.
Un mercado premium que se abre tras 25 años
La reapertura japonesa llega después de décadas de negociaciones intermitentes y de una serie de auditorías sanitarias realizadas por técnicos japoneses en establecimientos brasileños durante 2024.
Brasil ya cuenta con la certificación sanitaria internacional requerida, un paso clave que fue alcanzado a comienzos de este año.
El presidente Luiz Inácio Lula da Silva participó personalmente en las gestiones, durante su visita oficial a Japón en marzo, con el objetivo de fortalecer el diálogo político y comercial con Tokio.
«Brasil está preparado», afirmó entonces Lula, destacando la solidez del sistema sanitario nacional y la competitividad de su cadena productiva.
La decisión final corresponde al nuevo gobierno japonés, que deberá reanudar las conversaciones en curso y dar luz verde al protocolo bilateral.
Según Fávaro, existe voluntad política de ambas partes y «solo restan ajustes administrativos» antes de la apertura formal.
La habilitación del mercado japonés permitiría a Brasil diversificar sus destinos de exportación justo cuando las ventas a Estados Unidos se desaceleran, tras la aplicación de aranceles del 50 % por parte de la administración Trump.
De concretarse, el ingreso a Japón ampliaría el acceso de cortes premium con alto valor agregado, en un contexto de escasez de ganado estadounidense y precios internacionales récord.
«Sería estupendo para Brasil, porque Japón es un mercado premium donde se pueden exportar cortes de primera calidad», señaló Gilberto Tomazoni, director ejecutivo del gigante cárnico JBS.
El ministro Fávaro consideró que la apertura representará «una conquista histórica» para el país, al consolidar la imagen sanitaria y competitiva de la carne brasileña en Asia.
El desafío, reconoció, será ganarse la confianza del consumidor japonés, que demanda productos de alta calidad y con trazabilidad rigurosa.
