Autoridades chinas realizarán una nueva auditoria presencial en unidades brasileñas a finales de este año estimó el secretario de Comercio y Relaciones Internacionales del Ministerio de Agricultura, Roberto Perosa.

La Administración General de Aduanas de China (GACC) informó al gobierno de Brasilia que realizará otra auditoría presencial de las plantas brasileñas en el segundo semestre de este año.

“GACC informó que el foco en 2023 estuvo en el área vegetal y que este año el foco está en el área animal. Entonces, existe la posibilidad de habilitar más plantas”, afirmó Perosa .

Según publicó Abrafrigo, el Secretario también cree que el escenario actual aumenta las posibilidades de avance en las negociaciones para establecer el sistema de “prelistado”, acuerdo en el que la supervisión del ministerio brasileño es suficiente para garantizar el acceso a un mercado determinado. Actualmente, China solo adopta el modelo de preinscripción para Estados Unidos.

En el modelo actual, los frigoríficos brasileños necesitan adaptarse y cumplir con los criterios de China para ser incluidos en una lista de espera, que depende de la aprobación técnica de Beijing, generalmente realizada después de auditorías presenciales o por videoconferencia. Pese a las 38 calificaciones difundidas ayer por los chinos para mataderos en Brasil, seis fueron evaluadas y rechazadas por no conformidades.

Perosa afirmó que se continúa trabajando para cumplir con los criterios chinos y consolidar la calificación de las demás plantas de la lista. Una fuente que trabaja en este frente de negociaciones consideró que aún queda un largo camino por recorrer para que Brasil pueda establecer un prelistado con China, ya que depende de los avances técnicos del sector privado para cumplir plenamente con los requisitos.

“Tenemos que hacer nuestra parte para lograrlo. Las empresas brasileñas necesitan mejorar su autocontrol para cumplir con la legislación china”, afirmó. Para él, algunas neveras no fueron habilitadas en esta última ronda por “errores tontos”. “Esto demuestra cierto desconocimiento por parte de las empresas brasileñas. Con esto, China se da cuenta de que no puede avanzar [en la pre-lista”.