El mercado del ganado gordo para exportación parece haber frenado su trayectoria bajista y habría encontrado un piso luego de las correcciones consecutivas de las últimas semanas.
Entrevistados en Valor Agregado en el predio de la Regional Amambay, en el marco del 126 aniversario de Pedro Juan Caballero, los intermediarios Guillermo Gauto y Mauro Fernández coincidieron en que la industria dejó de recortar valores y se posiciona con precios más estables en un contexto de escalas cortas, baja disponibilidad de animales terminados y faenas reducidas por fin de año.
Con un mercado que cierra el año con volatilidad de precios y menor ritmo de negocios cerrados, ambos ubican las ofertas de las industrias entre US$ 4,10 y US$ 4,20 por kilo carcasa de machos y vaquillas, y en US$ 3,80 por vacas.
Para Guillermo Gauto, director de La Tropa, los ingresos de los animales a las plantas se acortaron en relación al comportamiento del último trimestre: “La escala hoy se acortó, llegó a estar a 15 días y ahora estamos hablando de una semana”.
Si bien entiende que la oferta es escasa, dijo que será importante evaluar las programaciones de las empresas para las fechas de las fiestas de cierre de año, donde las plantas tienen previstos cierres temporales.
De todos modos, consideró que la abundancia de lluvias y buenas condiciones climáticas en el norte permiten que muchos productores retengan animales para sumar kilos en el campo, lo cual también reduce la oferta para la industria.
Un mercado que tocó fondo en los precios
El ajuste del precio del ganado gordo venía siendo constante desde agosto, pero según Mauro Fernández, el movimiento habría llegado a su fin: “La baja semana a semana se estabilizó, hoy las industrias mantuvieron los valores”.
Fernández remarcó que las plantas frigoríficas se encuentran “bastante alineadas” y que la tendencia bajista fue reemplazada por un escenario de equilibrio, incluso en un momento del año donde tradicionalmente los precios suelen ajustarse por presión de oferta.
Perspectivas positivas para 2026
Tanto Gauto como Fernández coinciden en que el próximo año tendrá mejores condiciones.
Gauto fue gráfico al afirmar: “En el 2026 nos van a volver a dar el chupetín”, refiriéndose a que los valores podrían mejorar, impulsados por una menor oferta de gordo, mejores mercados y nuevos actores industriales que dinamizarán la competencia.
Destacó además el efecto positivo que genera el ingreso de nuevas plantas, como el ingreso de Los Lazos, y el interés de multinacionales como JBS y MBRF, que miran a Paraguay como polo de inversión: “Paraguay siempre fue atractivo para la industria; hoy hay más información y eso lo demuestra”.
Finalmente, Fernández dijo que todo indica que el 2026 se proyecta como un año favorable, especialmente para el productor que pueda administrar bien sus costos de reposición y alimentación. “Está claro que faltará hacienda, habrá demanda de carne y eso empujará al mercado”.
Y sintetizó: “La gente está apostando a la ganadería por la perspectiva que hay a futuro, no solo a nivel país, sino regional e internacional”.
