Con un 2025 que dejó precios históricamente altos tanto para la reposición como para el ganado gordo, el sector ganadero comienza a mirar el 2026 con expectativas positivas. Así lo entiende Egon Neufeld, productor ganadero y presidente de la Expo Rodeo Trébol, quien analizó el escenario productivo y comercial en diálogo con Valor Agregado por Radio Asunción 1250 AM.

Según Neufeld, si el clima acompaña, el próximo año podría repetir, o incluso mejorar, las condiciones observadas en 2025, en un contexto donde confluyen una demanda internacional firme, precios sostenidos y una oferta de ganado que continúa siendo limitada.

Uno de los puntos centrales del análisis es el mercado de la reposición. Para el dirigente chaqueño, la demanda interna de animales para invernada seguirá siendo elevada, lo que mantendría los valores del ternero en niveles altos. “La cotización de los terneros va a estar firme, porque la necesidad de reposición sigue siendo muy importante”, señaló.

Este escenario, sin embargo, también plantea el desafío de márgenes más ajustados, especialmente por la relación flaco-gordo. Aun así, Neufeld considera que el negocio continúa siendo atractivo, apoyado en un contexto global que juega a favor del productor.

Más mercados y una demanda mejor distribuida

En el plano internacional, el posicionamiento de Paraguay en nuevos destinos aparece como una de las principales fortalezas de cara a 2026. La creciente presencia de Estados Unidos como uno de los principales compradores de carne paraguaya es vista como una señal altamente positiva.

“Cuanto más podamos distribuir los huevos en diferentes canastas de exportación, mejor. Estados Unidos está comprando carne industrial, no premium, y eso permite valorizar categorías como la vaca vieja, los machos enteros de mayor edad y otros animales que antes tenían menos salida”, explicó.

A esto se suma un contexto global de baja disponibilidad de ganado. El stock bovino estadounidense se encuentra en mínimos históricos, comparables a los niveles de la década del 50, mientras que la demanda crece con mayor fuerza en Asia y se mantiene estable en otros mercados. “Ese escenario es claramente beneficioso para Paraguay”, afirmó.

El factor cambiario y las variables que no se controlan

Neufeld también hizo hincapié en los factores que escapan al control del productor, como la cotización del dólar y las condiciones climáticas. La reciente baja del tipo de cambio genera tensiones sobre los precios internacionales, incluso en momentos donde los valores locales resultan atractivos para el ganadero.

“Son coyunturas de juego que muchas veces se nos escapan de la mano. A veces hay mucha oferta y el precio local no conforma; otras veces hay poca oferta, el precio es bueno, pero el dólar cae. Y a eso se suma siempre el condicionante ambiental”, reflexionó.

Ganado gordo: precios sostenidos y demanda constante

Consultado sobre el comportamiento del ganado gordo en 2026, Neufeld se mostró cauto pero optimista. Tras la tregua estacional de fin de año,marcada por paradas técnicas y licencias en algunas plantas frigoríficas, considera que el mercado podría retomar la firmeza observada durante gran parte de 2025.

“Creo que podemos estar en los mismos niveles de este año, o incluso algo mejor”, sostuvo. La menor estacionalidad en la oferta, producto del mayor peso de los confinamientos, permite una entrega más pareja de animales a lo largo del año, mientras que la demanda internacional se mantendría activa durante todo el ciclo.