El índice de precios de la carne de la FAO disminuyó un 0,8 % durante el mes de noviembre, aunque sigue estando un 4,9 % por encima de noviembre de 2024 (5,8 puntos).
El descenso mensual continuó impulsado por la disminución de los precios de la carne de cerdo y de aves, mientras que las cotizaciones de la carne de bovino se mantuvieron prácticamente estables y los precios de la carne de ovino aumentaron.
Las cotizaciones de la carne de aves disminuyeron debido a la disminución de los valores de exportación de Brasil, en un contexto de abundantes suministros exportables y una mayor competencia mundial.
Esta caída se vio agravada por los esfuerzos por recuperar participación de mercado tras el levantamiento de las prohibiciones comerciales relacionadas con la influenza aviar (IAAP), por parte de los principales países importadores, incluida China, que levantó sus restricciones a principios de noviembre, según publicaciones de Eurocarne.
Los precios de la carne de cerdo también disminuyeron, debido a la disminución de las cotizaciones en la Unión Europea, en un contexto de abundante oferta y una demanda moderada, en particular de China, tras la introducción de derechos de importación a principios de septiembre.
Mientras tanto, la eliminación de los aranceles a las importaciones de carne de vacuno en los Estados Unidos moderó la presión alcista sobre los precios, especialmente en los productos australianos, ya que los principales exportadores buscaban mantener su competitividad, manteniendo los precios mundiales de la carne bovina prácticamente estables.
