La ganadería paraguaya se consolida como un actor de peso en los mercados internacionales, con una proyección alentadora para 2026. La creciente demanda global de proteína roja y el posicionamiento estratégico en mercados exigentes permiten al país proyectar oportunidades de crecimiento, aunque el sector aún enfrenta desafíos internos.

Según Marco Pereira, integrante de la Comisión Directiva del CEA, este año marcó un hito para Paraguay con la entrada firme en Estados Unidos, uno de los mercados más exigentes. “La presencia paraguaya en EE.UU. en octubre fue histórica; incluso ya compite con Chile”, aseguró.

Además de Estados Unidos, los mercados de Chile, Taiwán e Israel se consolidan como pilares del comercio internacional de carne paraguaya, demandando productos de alta calidad y fomentando la competitividad del sector.

El contexto global también juega a favor: países como Estados Unidos y Australia están reduciendo su stock bovino, lo que mantiene la carne en un mercado firme y con alta demanda. “La carne va a seguir faltando en el mundo. Todo esto hará que la carne siga con un desarrollo de mercado firme”, indicó.

Pereira destacó que esto representa una oportunidad única para Paraguay, que ha logrado avances significativos en genética y calidad, posicionando su carne a la altura de los principales exportadores del mundo.

No obstante, remarcó que el sector encara desafíos internos. La baja del stock bovino, la alta faena de hembras y el endeudamiento de los productores son factores que también impacta en la expansión.