Valor Agro accedió en exclusiva al informe elaborado por el sector primario y entregado al Senacsa este pasado martes 4 de noviembre, un documento de más de 100 páginas que propone una estructura técnica y de gobernanza sanitaria para acompañar el proceso hacia el levantamiento de la vacunación contra la fiebre aftosa.
El material, trabajado con asesores internacionales y bajo criterios científicos, marca una hoja de ruta clara, gradual y con garantías para toda la cadena cárnica.
El documento recomienda extender los plazos inicialmente manejados por el Servicio Nacional de Calidad y Salud Animal (Senacsa). Propone un período mínimo de 12 meses y máximo de 36, lo que ubicaría la última vacunación entre 2027 y 2029, siempre que se cumplan los objetivos y condiciones establecidas.
El enfoque busca priorizar la estabilidad sanitaria, el blindaje de fronteras y la vigilancia epidemiológica permanente, antes que acelerar un cambio de estatus sin garantías plenas.
Fuentes vinculadas al sector señalaron a Valor Agro que el texto fue elaborado con una visión “integral, técnica y responsable”, y que “los plazos no son caprichosos, sino coherentes con la experiencia regional y la complejidad de la estructura sanitaria del país”.
Un trabajo técnico robusto y validado internacionalmente
El informe fue desarrollado por equipos técnicos del sector primario con la asistencia de consultores internacionales especializados en sanidad animal y comercio exterior de carne (uno con base en Chile y otro en Uruguay), y pasará a ser analizado por especialistas de Panaftosa en Estados Unidos y Brasil.
También, según supo Valor Agro, se prevé en un futuro cercano la contratación de un experto argentino para reforzar la fase de interpretación técnica y ejecución de los lineamientos.
En paralelo, en un máximo de siete días se conformará una mesa de negociación que integrará al complejo cárnico, con el objetivo de consensuar los pasos a seguir.

El trabajo contempla garantizar la capacidad de vigilancia activa y pasiva, fortalecer los controles fronterizos, definir estrategias de contingencia y asegurar la disponibilidad de bancos de vacunas o antígenos, ya sea en Paraguay o en centros de referencia del exterior.
Según el documento, el sistema sanitario debe mantener capacidad de respuesta inmediata ante cualquier eventualidad.
Una visión técnica que busca consenso
Fuentes consultadas por Valor Agro destacaron la calidad técnica del material, lo que consideran que el consenso sobre la propuesta probablemente sea alto.
Si bien entienden que la estipulación de plazos es donde se puede generar mayor discusión, se entiende que es un periodo de tiempo lógico para avanzar con los trabajos e ir haciendo las evaluaciones correspondientes, en la medida que Brasil y Bolivia suman experiencias con el cambio de estatus y Argentina eleva la discusión.
Desde el complejo cárnico se entiende que este estudio es uno de los materiales técnicos más importantes de la sanidad del país y tiene una propuesta clara de unificar criterios y visiones entre los actores privados y públicos de la cadena cárnica nacional.
