La eficiencia productiva y la incorporación de tecnología en la cría bovina son claves para el futuro de la ganadería en América del Sur. Así lo sostuvo el investigador y experto en reproducción animal, Pietro Baruselli, durante una entrevista en el programa Valor Agregado de radio Asunción 1250 AM quien remarcó la oportunidad de fortalecer la cooperación regional para enfrentar desafíos comunes y elevar la productividad.
“El gran desafío está en la cría”, afirmó. Aunque reconoció que la recría y el engorde ya incorporan tecnologías con buenos resultados, señaló que la producción de terneros aún muestra bajos niveles de eficiencia.
“Usamos poca tecnología para la producción de terneros”, dijo , añadiendo que los índices de destete actualmente oscilan entre el 50 y 60% por vaca en edad reproductiva, cifras que consideró insuficientes frente al potencial del sector.
Para Baruselli, el problema no radica únicamente en la alimentación del ganado, sino en su rendimiento reproductivo. “Tenemos que tener vacas alimentando y producir un ternero por año. Es eso que se hace en las fincas que usan tecnología hoy”, sostuvo.
Sostuvo que la tecnología debe ser vista como una aliada no solo para aumentar la rentabilidad, sino también para mejorar el uso del suelo y la sostenibilidad del sistema.
“Estamos hablando de un sistema de cría que ocupa mucha tierra, que tiene baja tecnología aún y baja eficiencia. Es ahí donde está el desafío”, enfatizó.
A pesar de estas debilidades estructurales, destacó el enorme potencial que tiene América del Sur como región productora. “Si tomamos a América del Sur, tenemos 5% de la población mundial y producimos 25% de la carne bovina del mundo. Tenemos mucha tierra para ser explorada de forma sustentable, para producir mucho más de lo que producimos hoy”, explicó, con una visión positiva sobre el desarrollo ganadero en zonas como el Chaco paraguayo.
Finalmente, subrayó el papel clave que la región puede jugar en el escenario global. “Seguramente, América del Sur va a ser uno de los grandes productores de carne bovina para la alimentación humana”, añadió, recordando que la demanda mundial de proteínas de alta calidad como la carne vacuna no deja de crecer.
