El gerente general de la Cámara Paraguaya de la Carne, Daniel Burt, comentó que el sector privado está trabajando de manera efectiva con el sector público para mantener la constancia en la apertura de nuevos destinos y superar los desafíos burocráticos que conlleva la habilitación de mercados.
Destacó que nada de esto sería posible sin la atención particular en la sanidad animal, las gestiones políticas necesarias para sortear los procesos burocráticos y aprobar los exámenes que las industrias han superado de forma regular.
Señaló que, gracias a las prácticas implementadas en mercados exigentes como la Unión Europea, Chile, Israel, Taiwán y ahora Estados Unidos, el sector está muy fortalecido, lo que permite explorar nuevos horizontes y afrontar desafíos más grandes, como el ingreso a mercados aún. más exigentes, tal es el caso de Japón.
Respecto a los mercados del sudeste asiático a los que debería apuntar el país, mencionó que Filipinas y Singapur están en etapas más avanzadas y se espera su habilitación para el próximo año. Asimismo, se mantienen tratativas con Malasia y Tailandia, naciones importantes debido a sus grandes poblaciones y economías en desarrollo. Aunque actualmente no son los países que mejor pagan comercialmente, son mercados con un potencial de crecimiento significativo y con un aumento en el consumo de proteínas animales.
Burt también señaló que el principal desafío para la industria es enfrentar auditorías cada vez más exigentes, ya que los mercados lo exigen. «La gente quiere saber cada vez más sobre el origen de los productos y sus características. Estamos trabajando en implementar sistemas de trazabilidad y tipificación», comentó.
Agregó que, próximamente, por ley, se implementará la identificación individual, lo que, junto con otras acciones relacionadas con la trazabilidad y la construcción de confianza, fortalecerá la posición del país en el mercado internacional y en la generación de divisas. Sin embargo, reconoce que estos avances plantean solicitudes cada vez más difíciles para las industrias, que deben invertir constantemente en innovación para cumplir con las nuevas exigencias de los mercados.
También dijo que han surgido exigencias ambientales que a menudo parecen injustas o incluso proteccionistas. A pesar de ello, están trabajando para que las industrias paraguayas se mantengan entre las más serias y modernas de la región.
En cuanto al hato ganadero, señaló que los últimos años de sequía han provocado un aumento en la faena, lo que ha impactado negativamente en los niveles de producción. Sin embargo, espera que las condiciones climáticas mejoren, permitiendo la recuperación del hato ganadero, especialmente con la apertura de nuevos mercados y el fortalecimiento del sector.