La población bovina del país sigue con una tendencia a la baja y es un factor que preocupa a todos los sectores de la pecuaria. Randy Ross Wiebe, presidente de la Cámara Paraguaya de Carnes (CPC), sostuvo en Valor Agregado en Radio Pa’i Puku que todos los actores de la cadena deberían encarar un trabajo conjunto y diseñar estrategias para revertir esta situación. El representante del sector industrial habló también del mercado internacional de la carne, las perspectivas de precios del ganado y la postura sobre la vacunación contra la fiebre aftosa.

¿Cómo analiza el comienzo del año para la industria frigorífica?

En los primeros cuatro meses del año observamos una reducción cercana al 13% de la faena de bovinos en frigoríficos en comparación con el mismo periodo del año pasado, que son prácticamente unas 100 mil cabezas menos. Esto tiene que ver con algunos factores climáticos y también la situación en Rusia, principalmente en los meses de febrero y marzo.

¿Qué evaluación hace respecto a los mercados globales?

Respecto a los mercados, están funcionando de manera regular, hay algunos que están teniendo menos actividad, otros prácticamente con actividad nula como Rusia, pero eso fue absorbido en cierta manera por otros mercados. Abril fue un mes muy interesante, de mucha demanda, sobre todo de Europa y Chile; no obstante, hubo un freno nuevamente en mayo.

¿Qué papel jugó Chile para compensar el cierre temporal del Rusia?

Chile compra una carne totalmente diferente a lo que exportamos a Rusia. Más bien mercados como Brasil, países africanos y árabes fueron los que absorbieron esa carne que antes se destinaba al mercado de Rusia. Pero sí se observó un crecimiento de la participación del mercado chileno en los últimos meses, en cierta forma por no poder contar con el mercado de Rusia.

Con respecto a Rusia, ¿cuándo se podría volver a los volúmenes normales?

Este año vemos difícil que se puedan normalizar los envíos al mercado ruso porque estamos teniendo muy poca actividad por el tema de transferencias bancarias y problemas de logística. Hasta que no se suspendan las actividades bélicas entre Rusia y Ucrania vemos muy difícil que se pueda normalizar y vamos a tener que buscar mercados alternativos que absorban ese excedente de carne exportable que tenemos.

¿Dónde se puede colocar esa carne, Taiwán puede ser una alternativa importante?

Taiwán es una alternativa importante para ciertos cortes, no para todos, pero si es una opción interesante y podemos enviar parte de lo que destinamos a Rusia. También están mercados como Brasil, Uruguay y algunos otros países como Kuwait y naciones árabes.

Randy Ross, presidente de la Cámara Paraguaya de la Carne.

¿Cómo proyectan el resto del primer semestre para la exportación?

Hay mucha oferta de ganado, pero los mercados no están acompañando. Abril fue un mes más dinámico, pero ya en mayo observamos que las cantidades son más limitadas. Europa está mermando su compra y Chile tiene problemas de tipo de cambio y están teniendo una mayor oferta de carne de Brasil. Actualmente estamos notando un freno en los mercados, y por otro lado tenemos una oferta bastante fuerte de animales en el mercado interno y esa es la explicación por lo que se están moderando los precios.

¿Qué perspectivas hay para el segundo semestre del año para el precio de la hacienda?

Dependemos exclusivamente del precio que conseguimos afuera y del tipo de cambio; estos son dos factores importantísimos que definen en cierta manera el precio que se paga al productor. La escasez de ganado hace una presión adicional y también sabemos que hay una capacidad de faena muy fuerte en Paraguay y en el último tiempo no está creciendo el hato. Esto generará nuevamente una escasez de la oferta de ganado y va a tener efectos en los precios. Tal vez en los meses de agosto y septiembre podría darse un aumento de los precios de compra de ganado, por la cantidad de animales y la capacidad instalada de faena.

En 2022 podría darse un volumen similar de faenas al año pasado, cuando fueron históricos…

Creo que vamos a estar por debajo. Según los datos de la última vacunación hubo de nuevo una retracción del hato ganadero nacional y el año pasado tuvimos una faena muy por encima del promedio porque la gente vendió por encima de los valores normales por la sequía y las quemazones. Entonces este año habrá una merma de la faena de ganado en las industrias frigoríficas.

¿Es una preocupación para el sector industrial esta caída del stock de ganado?

Sin ninguna duda es preocupante. La capacidad de faena está aumentando; sin embargo, año a año el hato ganadero está disminuyendo y ese es un factor que a todos nos preocupa. Deberíamos ponernos de acuerdo entre todos los actores de la cadena y ver alternativas de cómo aumentar el stock, para ir creciendo de nuevo y aumentar los ingresos del país. Hay dos maneras de aumentar los ingresos; una es con mejores precios, tarea en donde estamos enfocados día a día con la búsqueda de nuevos mercados, y la otra es exportando más volumen. Los dos tienen que ir de la mano y tendría un impacto muy importante para el país.

¿Cómo analiza el aumento de la faena de toros y la disminución de novillos?

Hay mercados para distintos tipos de animales, pero no podremos mejorar así nuestra calidad de carne. Si queremos apuntar a una carne premium debemos aumentar la faena de novillos.

¿Se puede dar una diferenciación de precios para incentivar eso y encontrar mejores valores en el mercado internacional de la carne?

Hoy es menos, hay mercados que prefieren, pero son de menor volumen. El día que se encuentre un mercado que exija y pague un diferencial creo que a nivel país podremos hacer una diferenciación más grande. Hoy en día no tenemos mercados de volumen que paguen este diferencial.

¿Por último, qué posición tiene la Cámara Paraguaya de Carnes en relación al levantamiento de la vacunación contra la aftosa en Paraguay?

Todos los programas de erradicación tienen que tener un límite y no se puede vacunar eternamente, por ese lado es entendible la posición del Servicio Nacional de Calidad y Salud Animal (SENACSA). También el hecho de que todos los Estados brasileños limítrofes con el Paraguay están levantando la vacunación está ejerciendo una presión sobre el Paraguay. Sin embargo, a nosotros nos preocupa, pero vamos a tener que hacer porque ningún programa de erradicación es eterno y se van a tener que hacer programas de controles muy fuertes y por toda la frontera seca que tenemos nos preocupa. Es un riesgo y todos estamos preocupados.