Tras culminar su periodo al frente de la Asociación Paraguaya de Productores y Exportadores de Carne (APPEC), Ramiro Maluff hace una pausa para mirar hacia atrás y, sobre todo, para proyectar hacia adelante.
Con un estilo directo y sin estridencias, el dirigente asegura que estos años fueron “uno de los periodos de mayor aprendizaje y compromiso de toda su vida”, y que la huella dejada tiene que ver con algo que considera esencial: información, articulación y unidad.
Para Maluff, liderar la APPEC implicó tiempo, esfuerzo y un alto nivel de exposición, pero también la satisfacción de haber impulsado transformaciones concretas.
“Miro atrás y veo que hemos dejado huella en todo lo que hicimos. Esto no fue un trabajo mío: fue del equipo, de los socios, de todos los que entendieron que juntos somos más fuertes”, afirma.
Durante su presidencia, la gremial logró algo que no es menor: articular a los gremios productores, coordinar posiciones, tender puentes con la industria y abrir espacios de diálogo con el Gobierno.
Para el dirigente, Paraguay necesita “menos islas y más estrategia compartida”.
Articulación y puentes: unidad con identidad propia
Si bien la APPEC mantuvo, y mantendrá, su postura firme en defensa del productor, Maluff resalta que el gremio también supo construir puentes donde había distancias.
“La industria sabe que nos encontrará enfrente cuando haga falta defender la justicia en los precios. Pero en lo que podamos trabajar juntos, lo haremos. Ese es el único camino”, sostiene.
Esa misma lógica se trasladó al plano institucional: en los últimos meses, la APPEC mantuvo reuniones claves con el Ministerio de Industria y Comercio y otros organismos gubernamentales, aportando datos, diagnósticos y propuestas.
El gran desafío: información, transparencia y un nuevo MLP
Uno de los legados más relevantes del ciclo Maluff fue la instalación del concepto de transparencia informativa como piedra angular de una ganadería moderna.
Ante la ausencia de un Instituto de la Carne, postergado por años por falta de acompañamiento industrial, la APPEC decidió avanzar en su propio camino.
Así nace el proyecto MLP: Meat & Livestock Paraguay, una plataforma que unirá a los gremios para producir información estratégica y construir marca país.
“Tenemos todo alineado, incluso el nombre. Queremos generar información clara, seria, que sirva para profesionalizar la ganadería y darle herramientas reales al productor. Ojalá la industria también se sume en el camino”, adelanta.
Explicó que el MLP apunta a transparentar precios y mercados, reforzar la toma de decisiones del productor, mejorar la competitividad, impulsar acuerdos comerciales y posicionamiento país, y construir un ecosistema de confianza.
Para Maluff, sin buenos datos no hay planificación posible.
Un Estado que debe mirar más al campo
En un país donde la carne es una de las columnas de la economía, Maluff insiste en que el Estado tiene la responsabilidad de fortalecer su vínculo con el sector.
“En las últimas semanas vimos señales claras de mayor involucramiento del Gobierno, especialmente del MIC. Paraguay necesita una agenda conjunta que trabaje con información real y visión estratégica”, afirma.
La gremial está alimentando al Ejecutivo con datos sobre mercados, sanidad, precios y escenarios internacionales. Y espera que esa interacción siga creciendo.
Sanidad, diplomacia sanitaria y acuerdos: el nuevo tablero
Maluff también hace una lectura profunda de los desafíos que se vienen: la discusión sobre vacunación, la competencia global, los costos logísticos y la importancia de los acuerdos comerciales.
Su mensaje es claro: no basta con abrir mercados, hay que tener condiciones para competir.
“Uno puede tener escarapelas y habilitaciones, pero si un mercado tiene aranceles del 38% o 40%, la competitividad desaparece. Hay que mirar dónde realmente podemos vender con valor y volumen”, afirma.
Según él, el enfoque futuro debe estar en: diplomacia sanitaria estratégica, acuerdos bilaterales y multilaterales, mayor inserción inteligente en Asia, y competencia frente a gigantes como Australia y Nueva Zelanda.
Mirando adelante: stock, valor, competitividad
El dirigente cree que la información será clave para recomponer el stock, profesionalizar la producción y mejorar el valor de la carne paraguaya.
“Ser creíbles para los productores es lo primero. Con eso se construye confianza, y con confianza se construye futuro”, señala.
La ganadería enfrenta una etapa desafiante: precios internacionales sin demasiados sobresaltos, cambios en la geopolítica comercial y un debate interno que exige madurez técnica.
Para Maluff, el país está listo para dar ese salto siempre que haya unidad, datos y estrategia.
Una nueva etapa, sin dejar la trinchera
Aunque deja la presidencia, Maluff seguirá en la Comisión Directiva acompañando a Marco Panciotto, nuevo presidente, y a Albert Gunther, vicepresidente.
Su continuidad permitirá darle seguimiento al MLP y a las iniciativas que inició durante su gestión.
“Marcos nos pidió que los expresidentes acompañemos este proceso. Estaremos ahí para apoyar, abrir puertas e impulsar que más productores se involucren”, afirma.
