La carne vacuna de Paraguay sufrió un importante revés este jueves luego de que el Senado de los Estados Unidos votó 70 a 25 a favor de invalidar la acción de la administración de Joe Biden de permitir la apertura del mercado.

Todavía falta la aprobación de la Cámara de Representantes, donde se necesita 290 votos de 435; y la firma del Presidente de Estados Unidos para que la resolución votada entre en vigor.

En las últimas horas, el presidente Biden manifestó por medio de un comunicado de la Casa Blanca que “la Administración se opone firmemente a la aprobación de la S.J. Res. 62 que desaprobaría la acción del Departamento de Agricultura (USDA) de permitir el ingreso de la carne fresca de Paraguay a los Estados Unidos”.

Y sumó: “El Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA, por sus siglas en inglés) llevó a cabo una rigurosa evaluación científica que incluyó visitas a los sitios, un riesgo total análisis y revisión continua de la situación zoosanitaria de la región y concluyó que el riesgo de las importaciones de carne fresca de Paraguay son bajas”.

Como contrapartida, Jon Tester, uno de los senadores que impulsó esta acción de suspensión y busca su reelección en la Cámara Alta, dijo: “El presidente Biden destrozó esta decisión al reducir las preocupaciones para reanudar las importaciones de carne de res de un país con una historia reciente de fiebre aftosa”.

Además, según la plataforma del Senado, agregó: “La Administración Biden está poniendo en peligro nuestro suministro de alimentos y dando a los consumidores de Montana un trato injusto”.

Esta decisión de Estados Unidos es seguida muy de cerca por actores públicos y privados del complejo cárnico nacional: “Es una decisión increíble, esperamos atentos la decisión de diputados”, dijo una alta fuente del sector a Valor Agro.

La carne vacuna paraguaya logró la reapertura del mercado a finales del año pasado e inició con los envíos en 2024, donde a la fecha acumula unas 4.000 toneladas. Paraguay participa de la cuota de terceros países de 64.900 toneladas, donde la mayor capacitación del cupo lo logró Brasil.

Finalmente, el senador Tesler aseguró que “la administración no debería permitir las importaciones de carne de res de Paraguay hasta que Estados Unidos tenga datos que demuestren que los productores de carne paraguaya cumplen con el mismo estándar que los ganaderos estadounidenses”.