Tras el interés de Chile por la carne porcina paraguaya, desde el rubro se encuentran trabajando para adaptarse a las distintas exigencias de ese país, como la implementación de compartimientos sanitarios. El presidente de la Asociación Paraguaya   de Productores de Cerdo (APPC) Jorge Ramírez, manifestó a Valor Agro que el sector se encuentra trabajando en esa exigencia, dado que es un requisito clave que se tendrá que superar y que en algunos puntos el rubro debe adecuarse.

“Algunas granjas ya se adecuaron, esto por el nivel de avance en cuanto a tecnología y manejo sanitario y bioseguridad. Además de otras que se encuentran en proceso y que requieren inversión en infraestructura. Esto llevará tiempo”, indicó.

Comentó que la delegación chilena sigue trabajando con el país, con comunicaciones muy fluidas, acompañando y certificando lo que se está logrando.  Asimismo, el sector en conjunto con el Senacsa está analizando los elementos claves que en el corto plazo deberán cumplirse para lograr la apertura del mercado.

“Esto no es solo conseguir la habilitación de Chile para poder enviar carne, sabiendo que ese mercado es uno de los más competitivos de la región, tiene buenos precios y hace que las exportaciones sean sostenibles.  Nuestra carne de cerdo, por la calidad y por la disponibilidad que tiene, puede ingresar a muchos mercados menos exigentes, pero al no tener buen precio no se hacen sostenibles esas conquistas. Entrar a Chile es muy interesante para el sector, están bien encaminados los procesos y aún se está trabajando en la compartimentación”, destacó.

En cuanto a cuándo podría darse la llegada del producto paraguayo al mercado chileno, expresó que desde el rubro estiman que este 2024 se seguirá trabajando en cumplir este proceso, y que posiblemente desde inicios del 2025 se podrían dar los primeros ejercicios de exportación.

“Entonces, existe un tiempo, necesitamos transitar lo que es la adecuación de granjas y encontrar también los compartimentos donde se puedan dar todas las exigencias del ámbito sanitario y de bioseguridad, pero está todo bien encaminado para nosotros”, contó.

Explicó que el proceso es normal, ya que conquistar el mercado taiwanés llevó muchos años y fue complicado, y que los mercados exigentes requieren tiempo y la participación de todas las partes.

Negocio. En cuando a la renatbilidad del negocio, precisó que se encuentra con números positivos, que es rentable que se da por el equilibrio entre los costos de producción, que están hoy controlads, aunque siempre existe una pequeña fluctuación en el tema de los granos que componen la nutrición del animal dentro de la producción porcina.

Señaló que a pesar de esa fluctuación semanal, al ser un “commodity”, está estable y el precio que hoy se está pagando por el kilo de carne o de peso vivo del animal está por encima de los costos generales.

“Es un negocio rentable, positivo e importante señalar con una proyección de mediano a largo plazo con esa misma polaridad. Es decir, los inversores tanto nacionales como extranjeros, por ejemplo los chilenos, no solamente quieren comprar, sino también quieren invertir en la producción aquí, ya sea en genética o instalaciones, porque las condiciones están dadas en Paraguay para que invertir en el sector porcino es interesante y rentable para el inversor”, apuntó.