Las perspectivas del negocio ganadero son positivas para el segundo semestre del año, con expectativas de una valorización de las categorías de animales gordos a raíz de una menor oferta y un mercado global de carne que tradicionalmente acelera la demanda para las fiestas de fin de año.

El propietario de Ganadera Alborada, Carlos Pedretti, dijo a Valor Agregado en radio Pa’i Puku 720 AM que para el segundo semestre del año va a mermar la oferta de animales para faena, en especial entre septiembre y noviembre, lo que tendría impactos positivos en las cotizaciones. “Va a faltar hacienda gorda, por lo tanto entiendo que los precios deberían subir en esa época, llegando a superar los US$ 4 por kilo carcasa. Directamente por una cuestión de relación de oferta y demanda”, subrayó.

Pedretti comentó que actualmente la ganadería del Chaco y del norte de la Región Oriental está sufriendo la escasez de lluvias con falta de agua para los animales, lo que genera una mayor oferta de vacunos, que va a continuar en junio, y una demanda que dejó de pujar y terminó con un 20% de descalce entre el precio por kilo del gordo y la invernada, algo que no se veía desde hace unos 5 años.

El empresario ganadero consideró que esta situación previa al ingreso al invierno sucede por falta de infraestructura, que tiene de fondo falta de inversión a consecuencia del bajo precio del ganado que ofrece menos previsibilidad.

En esa misma línea, dijo que la referencia del ganado está dada, en parte, por el acceso a los mercados internacionales. “Si tuviéramos todos los mercados de Uruguay el precio se iba a ir para arriba”, afirmó Pedretti y agregó: “Rusia que es nuestro segundo mayor mercado, y es menos del 1% de la exportación de Uruguay; y Chile, con quien estamos muy contentos y compra más del 50% de nuestra carne, para Uruguay representa el 2 por ciento”.

Y remarcó: “A las claras, haciendo suma y resta, el hecho de tener a China, Japón, Corea del Sur, y Estados Unidos, da un plus de prácticamente dos dólares por kilo de carcasa, que para una exportación de 330 mil toneladas se dejan de ganar 600 millones de dólares”.

Finalmente, indicó, en relación al trabajo de apertura de mercados, que “el gobierno se debe espabilar, pero eso no va a suceder si los gremios agropecuarios no influyen”.