Las heladas registradas entre el sábado y domingo pasados pusieron en jaque unas 400.000 hectáreas de trigo y soja tempranera, según lo informado ayer por el ingeniero Héctor Cristaldo, presidente de la Unión de Gremios de la Producción (UGP).
Las localidades más afectadas fueron Itapúa, Alto Paraná y parte de Canindeyú, de acuerdo con lo explicado, aunque hasta el momento no se sabe exactamente el daño económico ocasionado y tampoco la cantidad precisa de productores perjudicados por el fenómeno climático.
Pérdida directa
Ante estos casos, los agricultores no tienen forma de salvar la producción, es decir, es una pérdida directa pues las miles de hectáreas afectadas por las heladas simplemente no se recuperan. “Lo que queda es volver a sembrar, pero con un año complicado como el que tenemos, las entidades difícilmente te financien de nuevo”, destacó Cristaldo.
El mismo titular de UGP nos envió en la víspera las imágenes que lograron captar el fin de semana y muestran las escarchas sobre los cultivos. Señaló que el miércoles probablemente se tengan los números precisos sobre el tema.
Expertos en meteorología habían anunciado hace aproximadamente un mes las bajas temperaturas que hoy se confirman, con vientos rotando hacia el sur, provocando un marcado descenso térmico y riesgo de heladas localizadas sobre el centro y sur del área agrícola, no así en la zona norte.
Según la dirección de meteorología, la temperatura más baja que se registró el fin de semana fue 3 grados en las localidades de Capitán Meza y Caazapá.
Fuente: abc.