El Fondo Monetario Internacional (FMI) observa en forma satisfactoria la rentabilidad que demuestra el sector de la producción e industrialización de la carne en Paraguay, manifestó ayer el subjefe de estudios regionales del hemisferio Occidental de la institución, Andre Meier.
Casi dos horas se reunió ayer por la tarde el subjefe de estudios regionales del hemisferio Occidental del FMI, Andre Meier, con el vicepresidente de la Cámara Paraguaya de la Carne, ingeniero Luis Pettengill, en su local, en Mariano Roque Alonso.
“Nos informarnos sobre la situación productiva y financiera de la industria de la carne en Paraguay, igual lo hicimos con otros sectores de la economía, tales como industria, servicios, agricultura, entre otros, para interiorizarnos de cómo está la situación del país”, explicó Meier.
Destacó que, según los datos proporcionados por la industria frigorífica y la ganadería, los precios internacionales de la carne cayeron levemente y que el hecho incidió levemente sobre el ingreso de divisas al país, pero que no afecta la rentabilidad de esta actividad.
“Los precios de la carne bajaron, pero los márgenes de rentabilidad están sólidos, y entre todos los rubros alimenticios, la carne es la que muestra mayor fortaleza”, agregó. De la reunión también participó el representante senior del FMI en Paraguay, Alejandro Santos.
En la oportunidad, el Ing. Pettengill, explicó que Paraguay faenó en el último periodo 1.900.000 cabezas de ganado, de los cuales unas 400.000 fueron terminadas en sistemas de confinamiento, con granos, aprovechando los bajos precios del maíz y de otros renglones agrícolas.
Explicó que la capacidad de la industria es para unas 2.500.000 cabezas por año y se está proyectando un crecimiento de más de 500.000 cabezas más por año.
Informó que nuestro país exportó en el último periodo unas 400.000 toneladas de carne equivalentes a peso carcaza y detalló que el país cuenta con unas 14,5 millones de cabezas de ganado bovino, y que el costo de producción de la carne, con pasto, es de aproximadamente de 60 centavos de dolar por kilo de peso vivo y que el mayor crecimiento de la actividad se está dando en la región Occidental.
Explicó que la mayor debilidad del sector es que justamente el Chaco, con más de 200.000 kilómetros cuadrados, dispone solamente un poco más de 700 kilómetros de ruta asfaltada, lo limita sacar la producción en tiempos de bonanza (lluvias).
Fuente: abc