FOZ DE YGUAZÚ (BRASIL)
Centenares de camiones que debían cruzar hacia el Paraguay, Argentina y a otros estados del interior del Brasil, se encuentran varados a un costado de la ruta y en el patio del Puerto Seco de la ciudad de Foz de Yguazú, debido a la huelga de fiscales de la Receita Federal del Brasil (RFB-aduana).
La movilización genera la protesta de conductores de camiones, por el trastorno que están sufriendo desde el pasado jueves, debido a que la liberación de cargas se volvió mucho más lenta de lo normal. La aduana funciona con una cantidad mínina de personal, por lo que todo es mucho más lento. Hasta ayer estaban 530 camiones al costado de la ruta en Foz, aguardando entrar al puerto. De esta cantidad, 80 son provenientes de Argentina, 40 de Paraguay y 410 que salen del Brasil.
La asesoría de prensa de la RF divulgó una nota aclarando sobre los trabajos en el Puerto Seco. La misiva señala que ayer fueron liberados 575 camiones que corresponden a cargas peligrosas, perecibles y de canal verde (cargas con bajo riesgo de irregularidad que son liberados automáticamente por el sistema). En un día normal, en promedio, se liberan entre 750 a 800 camiones, es decir que en la medida que se prolongue la huelga, más camiones quedarán parados.
Camioneros afectados reclaman por la demora en la liberación, causando perjuicio y trastornos. Muchos conductores de nuevo anoche pernotaron en la ruta, sin ninguna condición, y esperan hoy poder despachar sus cargas para continuar viaje.
DETALLES. La manifestación se inició hace dos semanas, pero el paro se realizaba solo los días miércoles y jueves y ahora es por tiempo indefinido. La movilización se realiza a nivel país y es en reclamo de mejora salarial. “Nos concentramos frente a la sede de la RFB y en el puerto seco; la tarea se realiza en forma lenta, de esa manera esperamos una reacción positiva del Gobierno a nuestros reclamos”, explicó Alfonso Burg, presidente del Sindicato de Auditores Fiscales de la RFB, en Foz de Yguazú (Sindifisco).
Informó además que los funcionarios resolvieron realizar una manifestación más intensa, retirando parte del personal. Es decir que los despachos se realizan mucho más lento y que el patio del Puerto Seco se está llenando de filas de camiones.
Según Burg, todos los auditores apoyan la huelga y el levantamiento solo depende de las acciones que vaya a adoptar el Gobierno federal. “El Gobierno tenía conocimiento de que esta acción estaba prevista. Infelizmente, va a perjudicar a mucha gente, pero estamos enfocados en tener un retorno positivo”, destacó.
Fuente: UH