Hace pocas semanas, el remate anual de la cabaña estadounidense “Schaff Angus Valley” confirmó una noticia que se viene registrando en los últimos años: los altos precios alcanzados por los Angus de pedigree.
El reconocido establecimiento de Dakota del Norte, fundado en 1902 y especializado en la cría de Angus de pedigree desde 1942, vendió en esta oportunidad 475 toros y 220 hembras. El precio máximo correspondió al toro “SAV Sensation 5615″, cuyas 2/3 partes fueron vendidas en US$ 650 mil.
Además, en la National Western Stock Show, la mayor feria ganadera del mundo realizada en enero, en Denver, la vaquillona “SAV Emblynette 5368″, donada por “Schaff Angus Valley” a la Asociación Estadounidense de Angus, fue rematada en US$ 230 mil.
¿Cómo interpretar estos resultados en un contexto global? “La genética de Schaff es realmente muy destacada para las condiciones productivas de su país”, dijo a Valor Carne el Ing. Agr. Horacio Gutiérrez, titular de la cabaña “Tres Marías”, que visitó varias veces la cabaña estadounidense.
En ese sentido, destacó que “el peso promedio de los 475 toros vendidos en el remate de Schaff fue de 700 kilos con 12 meses de edad. Es decir, que son ejemplares con un significativo potencial de crecimiento”.
Pero más allá de las asimetrías, para Gutiérrez, “estos valores, más la fuerte presencia del Angus en países ganaderos como Australia, Canadá y en la Argentina, donde supera el 50% del stock nacional, demuestran el liderazgo de la raza, reconocida mundialmente por la calidad indiscutible de su carne”.