×

Día Mundial de las Zoonosis: cómo prevenirlas

  • Compartir

Día Mundial de las Zoonosis: cómo prevenirlas

(*) Un 6 de julio del año 1885 el científico francés Louis Pasteur aplicó por primera vez una vacuna a un niño que había sido mordido por un perro infectado con rabia. Éste hecho le salvó la vida, y desde ese entonces todos los 6 de julio se conmemora esta fecha como el Día Mundial de las Zoonosis, enfermedades de los animales que, como la rabia, se pueden prevenir con distintas estrategias y tecnologías sanitarias.

Las zoonosis son enfermedades infecciosas que, bajo determinadas circunstancias, pueden transmitirse de los animales a las personas, tanto por el contacto directo con el animal, como a través de un vector, el medio ambiente o por el consumo de alimentos de este origen contaminados con el patógeno. Según datos de la Organización Mundial de Sanidad Animal (OMSA), más del 60% de los agentes patógenos que afectan a las personas tienen su origen en los animales.

ypoti

La rabia, la brucelosis, la gripe aviar, la tuberculosis y la leishmaniasis visceral son algunas de las más de 200 conocidas, y afectan tanto a animales salvajes como a animales de producción -bovinos, porcinos, aves- y también a los animales de compañía como gatos y perros. Algunos de estos agentes tienen potencial para convertirse en pandemia, como sucedió con el coronavirus SARS-CoV-2 causal de la enfermedad COVID-19.

Estas enfermedades son un problema de salud pública muy serio que amenaza no solo la salud animal y humana, sino también la cadena de producción y la inocuidad de los alimentos, con un impacto fuertemente negativo en la producción pecuaria y en las economías de los países. Un brote de gripe aviar, por ejemplo, puede eliminar completamente la producción avícola de una región. Esta zoonosis además es considerada una enfermedad transfronteriza, por la facilidad con la que se puede propagar de un país a otro.

Prevenirlas es importante para evitar la aparición de brotes y reducir este impacto, que puede llegar a tener graves consecuencias. Éste es un desafío muy grande, dado el contacto estrecho que tienen las personas con los animales que transmiten estas enfermedades en distintos ámbitos como la explotación pecuaria, las tareas de protección de fauna silvestre, e incluso la vida cotidiana de muchas personas que eligen compartir su vida con animales de compañía.

Su prevención varía de acuerdo a cada patógeno, pero en la gran mayoría de los casos intervenir en la fuente animal es una de las estrategias más efectivas para su control. Tal vez la más importante de todas y para la que existen herramientas tecnológicas disponibles, es la vacunación a los animales en el caso de la rabia, la influenza aviar, la brucelosis y el carbunclo, por ejemplo, así como también el control bromatológico de los productos de origen animal. En todos estos casos, un diagnóstico temprano también es una gran herramienta de prevención.

Cuando hablamos de zoonosis no podemos dejar afuera el concepto de “Una Sola Salud”, promovido por diversos organismos internacionales como la Organización Mundial de Sanidad Animal (OMSA), la Organización Mundial de la Salud (OMS), la Organización Mundial para la Alimentación y la Agricultura (FAO), que resalta el vínculo interdependiente entre la salud humana, la de los animales y el medio ambiente en el que conviven.

Considerar lo mencionado deja en claro que velar por el bienestar animal en todos sus aspectos, no solo mejora su salud, sino también evita la transmisión de posibles enfermedades a las personas y deja en evidencia, como lo hizo Louis Pasteur hace más de un siglo, que prevenir las zoonosis con tecnologías orientadas a la salud de los animales y las personas es más que nunca la herramienta clave para la protección de la salud en su conjunto.

(*) Material elaborado por Juan Cruz Muriel, gerente Técnico Comercial de Biogénesis Bagó, y Gustavo Combessies, gerente Operativo de Laboratorio Azul