La asesora de comercio exterior de la Cámara Paraguaya de Exportadores y Comercializadores de Cereales y Oleaginosas (Capeco), Sonia Tomassone, dijo que es indispensable que Paraguay, como país mediterráneo, tenga en buenas condiciones los ríos Paraná y Paraguay para poder navegar los 365 días del año y no perder competitividad en la región.

En comunicación con Valor Agregado en radio Pa’i Puku, Tomassone reconoció que, si bien el gobierno nacional y sector privado vienen realizando trabajos de dragado de forma conjunta, “es importante tener un plan de corto, mediano y largo plazo para disponer de ríos navegables las 24 horas”.

Sostuvo que las lluvias del comienzo de la primavera están dejando un panorama más alentador, debido a que los ríos lograron elevar los niveles de agua y eso permite una mejor navegabilidad.

Además, manifestó su disconformidad ante la fijación del peaje en la hidrovía que desea implementar la Argentina, afirmando que de concretarse, las exportaciones del Paraguay podrían verse severamente afectadas a causa del sobrecosto que representaría para las navieras, tanto nacionales como las de los países vecinos.

“La fijación del peaje podría repercutir negativamente, no solo en las exportaciones de Paraguay sino también de otros países que utilizan la hidrovía, a causa del elevado costo logístico que va a generar el cobro de una tarifa de peaje”, resaltó.

Exportación. La Asesora de Comercio Exterior de Capeco remarcó la situación actual del sector y mencionó que las exportaciones de soja vienen sufriendo una merma de 6 millones de toneladas en materia de producción, a raíz de los efectos agroclimatológicos sobre la última campaña; haciendo que al mes de octubre ya se vayan cerrando las exportaciones de granos y sus derivados.

“Este comportamiento llevó a que haya prácticamente US$ 4.000 millones menos en concepto de ingresos de exportación de soja, si se compara con el mismo periodo del año pasado”, resaltó.

En contrapartida a la soja, subrayó que se tuvo una excelente producción del maíz, dinámica que les garantiza un estimación de 6 millones de toneladas para el cierre del año.

“Se está exportando a un ritmo muy rápido y accediendo a mercados no tan tradicionales. Sabemos que Brasil es el principal destino, pero dada la coyuntura internacional de falta de maíz y los altos precios del rubro, el 52% se está llevando al mercado de extrazona, lo que compensa en parte algunas pérdidas generadas por la soja pero no en su totalidad”, finalizó.