Téc. Aníbal Morel

Los técnicos del Instituto Paraguayo de Tecnología Agraria (IPTA) trabajan en el desarrollo de variedades de soja resistente a múltiples problemas, tales como las plagas, enfermedades e, incluso, el estrés térmico. Teniendo en cuenta que la roya es una de las principales afecciones para el productor, los profesionales crearon un material con mayor resistencia que permite disminuir las aplicaciones de fungicidas en el ciclo normal del cultivo.

En el IPTA de Capitán Miranda, departamento de Itapúa, existe un desarrollo eficiente de materiales para la agricultura extensiva. Específicamente, en el área de mejoramiento genético del cultivo de soja existen desarrollos en germoplasma y líneas de variedades nuevas. Todos los trabajos están enfocados en los problemas que sufre el productor en el campo. De acuerdo a la experiencia profesional, desde hace 10 años se busca la obtención de variedades tolerantes a la roya, enfermedad que causa estragos en el cultivo de la oleaginosa.

PRUEBAS RECIENTES

En el mes de enero, en la parcela de un productor, en la zona de Santa Rosa del Monday, se sembró la variedad denominada soja PAR R19. Dicho material genético fue utilizado en 11 ha, con el objetivo de obtener más cantidad de semillas. Su rendimiento promedio resultó en 4000 kg/ha, con una sola aplicación de fungicida. Los datos preliminares llamaron la atención del productor.

DISPONIBILIDAD

Las semillas de soja PAR R19 están únicamente en semillero. Hoy se tienen sembradas unas 250 ha, las cuales corresponden a la segunda zafra o zafriña. La proyección de siembra en zafra normal es llegar a las 12.500 ha con este material.

USO DE DEFENSIVOS AGRÍCOLAS

En cuanto a aplicación de fungicidas contra roya, ello dependerá de la época de siembra del cultivo. Por ejemplo, en la siembra anticipada, que inicia en setiembre, podría ejecutarse una sola aplicación, porque no existe un ambiente propicio para el desarrollo de la enfermedad. No obstante, de octubre en adelante, la recomendación es aplicar dos a tres veces el defensivo en la segunda zafra del cultivo. Esta estrategia es realizada en el caso de que se presenten otras clases de hongos, principalmente aquellos que atacan a final de ciclo.

Según los registros de este año, sea en siembra anticipada como normal, el productor realiza como mínimo cinco aplicaciones de fungicidas para controlar la roya.

CONTROL DE LA ROYA

Con la aparición de la roya, el productor asume elevados costos de producción, a fin de controlar la enfermedad con el uso excesivo de agrodefensivos, con la salvedad de que solo algunos productos específicos la controlan. En tal sentido, desde el punto de vista investigativo y de desarrollo, desde el IPTA se busca combinar los aspectos genéticos de una simiente, con aquellos elementos químicos de los fungicidas, a modo de paliar la afección y lograr el 100 % de rendimiento en el campo.

REFUGIO

Debido a que el material posee el gen que controla la roya, probablemente no haga falta establecer refugios. Sin embargo, el productor deberá efectuar las aplicaciones correctivas de fungicida para garantizar la ausencia de la enfermedad.

DESARROLLO EN LA REGIÓN

En Brasil y Argentina existen empresas privadas que se dedican al desarrollo de variedades resistentes a la roya y a otras enfermedades. El hecho de contar con material propio de Paraguay, podría favorecer el establecimiento de futuros convenios, con miras a probar la semilla local, modificada genéticamente, en los campos de los países vecinos.

Técnico especialista en cultivos extensivos

Fuente: ABC