La empresa brasileña JBS anunció ayer la venta de sus negocios en Argentina, Paraguay y Uruguay. En nuestro país cuenta con un frigorífico en Belén, en el departamento de Concepción. En un escueto comunicado, directivos de JBS en Paraguay dijeron que se mantendrán los negocios hasta que concluya la operación, que contempla la gestión de empleados en los países involucrados.
En un despacho de la agencia AFP se divulgó ayer que el gigante brasileño de la alimentación JBS, que afronta una multa récord por corrupción, anunció la venta de sus negocios de carne bovina en Argentina, Paraguay y Uruguay a la firma brasileña Minera, por 300 millones de dólares, para disminuir su endeudamiento.
Agrega AFP que la operación, que se realizará a través de subsidiarias de ambas empresas, fue aprobada por sus consejos de administración y solo se aguarda la autorización de los órganos de regulación.
Señala también que el movimiento llega menos de una semana después de que se conociera el acuerdo judicial por el que el grupo J&F (el holding propietario de JBS) pagara una multa récord de más de 10.300 millones de reales (unos 3.000 millones de dólares al cambio actual) por su implicancia en escándalos de corrupción.
El más explosivo, según el despacho noticioso, desató un terremoto político que tiene contra las cuerdas al actual presidente de la República Federativa del Brasil, Michel Temer.
En nuestro país esta empresa instaló un frigorífico en la ciudad de Belén, departamento de Concepción. Ayer intentamos conversar telefónicamente con directivos de esta compañía radicada en nuestro país. Sin embargo, en la citada empresa nos indicaron que directivos de la empresa no están dando declaraciones públicas y que en todo caso se les remitiera, vía correo electrónico, las consultas respectivas surgidas con relación a esta operación.
Le remitimos un breve cuestionario para saber sobre el futuro del frigorífico instalado en Belén y si cómo afectará la operación de venta de JBS el funcionamiento de esa industria cárnica.
La respuesta, remitida por Mauro Teixeira, asesor de comunicación, expresa, entre otras aclaraciones, que JBS se compromete en mantener el curso regular de los negocios hasta la conclusión de la operación, que incluye una gestión de los empleados en cada uno de los países involucrados.
También intentamos conocer la opinión de autoridades de la Cámara Paraguaya de la Carne, pero no respondieron a nuestras llamadas telefónicas.
Soborno y red de corrupción. El despacho de AFP expresa que en el centro de la polémica está Joesley Batista, uno de los dueños de JBS, quien gravó una conversación en la que el actual mandatario brasileño, Michel Temer, parece darle luz verde para pagar un soborno a un poderoso exdiputado encarcelado por la red de corrupción en Petrobras. Agrega que los hermanos Joesley y Wesley Batista y otros ejecutivos de JBS confesaron, tras firmar un acuerdo de delación premiada, el pago de centenares de millones de dólares en sobornos a campañas políticas de prácticamente todos los partidos. De acuerdo a las publicaciones, también pagaron sobornos a los expresidentes del Brasil Luiz Inácio Lula da Silva y Dilma Rousseff.
Fuente: ABC
