“Se está buscando llegar a un 100% de los animales vacunados y ojalá éstos sean inmunizados”, explicó Arnaldo Mosqueira, quien afirmó que ese es el objetivo de este segundo período de vacunación iniciado el pasado 17 de abril.

El gerente general de Alianza Agropecuaria del Paraguay dijo a El Agro que esta etapa es para los animales menores, es decir, los terneros y los desmamantes machos y hembras. Este período es un refuerzo para los terneros “quienes estaban en condiciones de edad ya recibieron su primera dosis y al resto les toca ahora con una edad relativamente aceptable”.

El doctor veterinario recordó que el movimiento de estas categorías durante este tiempo está prohibido hasta después de 15 días del registro de la fecha final de vacunación de cada establecimiento. De igual forma que informó el el Servicio Nacional de Calidad y Salud Animal (Senacsa), Mosqueira afirmó que se planea vacunar cerca de 5 millones de cabezas.

Respecto a la posibilidad planteada de, en un largo plazo, dejar de vacunar contra la aftosa, Mosqueira señaló que tiene una apreciación “muy particular” en cuanto al tema. Expresó que no lo ve imposible, “pero muy difícil aún”.

El gerente de Alianza entiende que el productor paraguayo hoy es muy maduro, “sabe lo que quiere”. Recordó los años malos que vivió Paraguay y aseguró que “el paraguayo entendió que no tiene que jugar con la inmunización contra la aftosa, la vacunación”. A su entender, “colgar la jeringa es muy difícil porque tenemos muchos animales silvestres (…) y esos animales no se inmunizan, pueden tener la inmunización natural que adquieren luego de haberse enfermado”.

Mosqueira aseguró que Paraguay tiene “un caldo de cultivo permanente y si colgamos la jeringa hoy en día podría ser complicado y venirnos un aluvión”. Por todo esto, el veterinario opina que no se debe dejar de vacunar contra aftosa.

Otras enfermedades. Además del problema de la langosta, que está siedo combatida, Paraguay sigue teniendo una carga muy alta de garrapatas en varios lugares, fundamentalmente en lo que sería la región oriental por el clima más húmedo. Mosqueira señaló que la humedad y el calor “conforman un ambiente muy propicio para todo tipo de parásitos”.

Fuente: El Agro