Pese al principio rector de “mes nuevo, liquidez nueva” de los mercados líquidos y desarrollados, Chicago no consiguió que las compras de contratos tuvieran un efecto de levantar los precios, pese a que las caídas de cierre fueron apenas perceptibles. Esto por lo menos en cuanto a los cultivos de verano, ya que el trigo por su lado, cayó bastante más.
Este comportamiento, si bien atípico para inicio de mes, bien puede representar la situación actual de desborde mundial de granos. Se puede pensar que siguen bajando los precios al barrer o, lo que no es lo mismo, que éstos cayeron – aunque a gatas – pese a la mayor predisposición al riesgo de los fondos, comprando posiciones al empezar el mes. No obstante esto, no consiguieron torcer la tendencia y los precios terminaron por volver a ceder terreno, ante la falta de noticias que sacudan al mercado.
Los refugios tradicionales anti riesgo vieron caer en su atractivo este lunes – dólar, bonos se desvalorizaron este lunes – pese a las preocupaciones crecientes sobre un enlentecimiento de la economía mundial y la caída en el gasto de los consumidores estadounidenses durante diciembre, si bien su nivel de confianza estaría demostrando buena salud. El crudo, por su parte, volvió a subir ante las compras que se vienen dando aprovechando los niveles de precios históricamente bajos. A esto se sumó la huelga del principal sindicato de trabajadores petrolíferos de EEUU, siendo lo suficientemente oportuno para buscar detener la producción – al menos transitoriamente – justo en un contexto bajista. Tan trillado como buscar enfriar un partido en el mejor momento del rival…
El maíz intentó dispararse temprano, después de mantenerse por encima de los mínimos del viernes durante la sesión electrónica de este lunes. El anuncio sobre ventas a México por 130.000 tons de maíz disponible le dio un respaldo adicional a este intento alcista. Sin embargo, esto no consiguió evitar la pérdida de impulso, que se estableció definitivamente al conocerse la inspección de embarques para exportación de la última semana, siendo de 660.000 tons, alineado con las expectativas del mercado. Esto, sin embargo, lo deja 300.000 toneladas por debajo del paso semanal necesario para completar el pronóstico comercial anual del USDA.
En el último año móvil, las inspecciones de exportación se ubican actualmente 2% por encima de un año atrás, pese a que el organismo oficial augura una caída total anual.
La soja bajo un poco más todavía, después de una sesión de hacha y tiza. La posición marzo terminó en su menor nivel en tres meses, tras perder más de las tres cuartas partes de la escalada alcista de octubre, cuando todo era subas, por logística trancada, cosechas demoradas, barcazas y trenes colapsados y compradores con nerviosismo creciente. Las inspecciones de exportación de la última semana conocidas hoy estuvo largamente por encima de lo previsto. China viene representando casi 3 de cada 4 toneladas embarcadas (72%), estando los volúmenes embarcadas 19% por encima de la misma fecha medido como año móvil. El USDA, por su parte, augura un aumento de las ventas de solo 8% para el año comercial. Quién ajusta y quién paga la diferencia, quien tiene la plata, quién tiene respuestas a esto…
El clima en Sudamérica no presenta grandes contratiempos por el momento, con los productores en el norte de Brasil empezando a cosechar las primeras chacras, con buenos rindes hasta el momento, todo lo cual lo están mandando para los silos, sentándose a esperar por la vuelta de la plata y sin apuro alguno por (mal) vender el fruto de un año de trabajo. Aplauso, medalla y beso para ellos.
Los precios del trigo cerraron con caídas fuertes, alcanzando nuevos mínimos en los tres mercados y sin ver todavía el fondo. También para el cereal de invierno la falta de amenazas climáticas y la producción mundial superior a la demanda, está ejerciendo su peso sobre los precios. Salvando las distancias, el mismo caso de la soja, aunque un poco más distribuidas las regiones productoras. Las exportaciones embarcadas e inspeccionadas conocidas este lunes representaron caídas en todos los aspectos comparados, salvo vs la expectativa de los operadores.
Inspecciones de exportación informadas este lunes por el USDA:
Maíz 660.000 tons
Soja 1.700.000 tons
Trigo 395.000 tons
Fuente: FIMIX – Agrofinanzas