Comienzo de semana y último día de funcionamiento de la rueda física con operadores humanos y negociando los contratos a viva voz en el parquet de la Bolsa de Chicago. Desde hoy en adelante la operativa será completamente electrónica, con órdenes comerciales emitidas en algún momento por gente, pero ejecutadas y calculadas – súper algoritmos mediante – por ellas: las supercomputadoras.
Los mercados financieros se mostraron nerviosos desde temprano, al confirmarse la victoria del NO en el referéndum griego, a las condiciones impuestas por la comunidad financiera internacional para el rescate. Así fue como el dólar se mantuvo firme todo el día, como refugio tradicional y en detrimento de otros activos. La gran familia de los mercados (hoy en día, todo lo es) no ocultó sus preocupaciones cerniéndose sobre la Acrópolis, si bien la parte más alta de Atenas corre riesgo de mezclarse con la más baja, en lo que sería el resultado de la coctelera en la que se encuentra el gobierno griego, con su ministro de finanzas huyendo por la puerta de la cocina, con la túnica atravesada al cuerpo – que va siendo lo único que les queda a los griegos frente a lo que les viene de los acreedores internacionales – y al grito de: Eurozonaaaaa, decime qué se sienteeee…. Se dice que le quedan pocas horas a Grecia para negociar una salida con los países de la Unión (se descuenta que a esta altura, leonina) antes de que la sangre llegue al río.
El maíz y la soja siguen preocupando al mercado, en la medida que se va conociendo cada vez mayor detalle para los diferentes Estados productores en EEUU, muchos de los que sufren el efecto solapado de mirar los datos a nivel país, que no es otra cosa que considerar promedios ponderados de cada uno de ellos, considerando su importancia y evolución actual de ritmos de siembra, calidades, etc. En definitiva, los indicadores de producción siguen preocupando a los operadores, que ya vieron como el USDA se dedicó a borrar de un plumazo la información que hasta ayer perjuraba por Dalma y por Giannina que era la posta.
Los cierres para estos dos cultivos fueron bajistas, con el maíz cayendo marginalmente menos de un dólar por toneladas, mientras la soja vio aflojes mayores. Sin embargo, ambos granos mantienen todavía gran parte del alcanzado al cierre de la semana anterior. Se mantienen los pronósticos de lluvias para los próximos días, si bien empiezan a considerarse los matices que significa menores volúmenes que los acumulados hasta hace poco. De todas formas, se mantienen las condiciones adversas en la cuenca de los ríos más importantes para la navegación y carga de barcazas y barcos graneleros, responsables de aliviar los elevadores portuarios, los que están viéndose cada vez más complicados por no poder despachar los volúmenes enormes almacenados debido a las condiciones peligrosas para cargar las naves.
El maíz cayó levemente, perdiendo menos de un dólar por tonelada, mientras que la soja cedió un poco más de terreno al caer alrededor de seis dólares, ambos granos movidos fundamentalmente por la entrada masiva de los Farmers al mercado disponible a ponerle precio a su producción. Al mismo tiempo, se vio productores empezando a atar el precio de la nueva zafra en curso con algún instrumento de cobertura, aprovechando precios actuales que no se veían desde varios meses atrás.
El trigo, por su parte, subió nuevamente, al basar los fundamentos alcistas no solamente en los retrasos de la cosecha estadounidense debido a lluvias persistentes, sino también en condiciones de seca, a esta altura preocupantes en otros orígenes tan cercanos a los EEUU, como Europa o Mar Negro, así como tan cercanos como Canadá.
En la actualización semanal de las inspecciones de exportación, los cultivos estivales estuvieron dentro del rango previsto por el mercado, mientras el trigo se ubicó sobre el techo de las previsiones.
Las condiciones de avance de siembra de soja, cosecha de trigo invernal y de calidad de los cultivos relevados resultaron mejor de lo esperado aunque, debido a ser publicadas como es costumbre posterior al cierre del mercado, su efecto podrá ser medido recién en la operativa de martes.
Fuente: FIMIX – Agrofinanzas