Chicago cerró con muy leves retrocesos en maíz y soja, al tiempo que el trigo fue el abanderado del mercado y el único que consiguió salvar el honor de los granos, en un día en donde los activos financieros operaron de menos a más.
El maíz fue una de las excepciones a la regla de las subas, cediendo apenas algunos pocos centavos. Las bajas no alcanzaron a hacerle perder el promedio de 50 días móviles. Los Farmers muestran una mayor predisposición vendedora, aprovechando los precios alcanzados la semana pasada en Chicago, urgidos por una siembra que se les viene encima y a la que deben hacer frente de alguna forma. Si no es vendiendo todo, que no es el caso, por lo menos a través de ventas parciales que les den la liquidez necesaria para la compra de insumos.
El trigo subió, llegando a máximos en el último mes. Los fundamentos se muestran cada vez más sólidos, con el factor nieve protegiendo la oferta de las pérdidas por heladas, mientras se alimentan los rumores sobre una pronta autoexclusión rusa del mercado mundial, pese a la competitividad que exhibe el trigo de ese origen en todos los mercados en donde se ofrece y coloca. Representaría una excelente oportunidad para EEUU, a la espera de una redirección de la demanda hacia la tierra de las oportunidades. Todo es supuesto por ahora, pero los fondos deben tomar posición de todas formas ante esto.
FIMIX – Agrofinanzas