Los granos cerraron con pérdidas generalizadas este viernes en Chicago, con el dólar alcanzando nuevos máximos – no vistos desde 2003 – llegando casi a equipararse pelo a pelo con el Euro, cosa que no se veía desde entonces.
El alto valor del dólar encarece aquellos productos denominados en dicha moneda, como los granos, lo que provoca el ajuste a la baja en las cotizaciones, aunque Brasil tiene el plus de la máquina de emitir Reales. En ese sentido, este viernes la moneda brasilera tocó su mínimo en los últimos años, valiendo 3,25 Reales por cada dólar en el mercado de Brasil. La expectativa de un aumento próximo en las tasas de interés por la Reserva Federal Estadounidense (FED) también ejerce su influencia sobre los precios de los activos financieros que cotizan en dólares (se vuelven más caros), lo que aumento su atractivo en desmedro de otros activos, como los commodities.
El crudo bajó casi dos dólares por barril durante la sesión vespertina de Nueva York. El oro, por el contrario, subió 50 centavos la onza, mientras que las acciones se desplomaron ante los malos resultados de las corporaciones energéticas y las ideas de un dólar más fuerte perjudicando el desempeño comercial de las multinacionales con base en EEUU.
El maíz cerró en baja, presionado mayormente por el dólar y por el dato decepcionante de negocios cerrados para la exportación durante la última semana. El brote de gripe aviar en Arkansas podría dar el toque de gracia a la caída de precios en los cultivos estivales, en caso de empezar a levantarse prohibiciones de importar carne de ave estadounidense por los compradores actuales. Eso desencadenaría una serie de efectos negativos: caída en las ventas de carne aviar, baja en la demanda de alimento para los animales (harina), lo que se extendería a los granos. En la operativa nocturna estuvo movido. Las primas en el interior del cinturón maicero de EEUU se mostraron de sostenidas a dispares durante este jueves. Se está empezando a ver algo más de posicionamiento vendedor de los Farmers, previo a acelerarse el ritmo de siembra en EEUU.
La soja cerró con pérdidas de hasta seis dólares por tonelada en las posiciones más cercanas. El dólar más fuerte así como el brote de gripe aviar y los poco nuevos negocios de exportación reportados este jueves, tienen su peso en la caída sostenida de los valores. A eso se suma Brasil vendiendo a todo vapor, con la máquina emisora como mejor amiga, ya que se mantiene (o baja levemente) el valor de exportación, mientras los agricultores se hacen de cada vez más Reales por tonelada. Todo muy lindo, mientras los brotes inflacionarios no pasen la factura por abajo de la puerta. En el nocturno, la soja se mostró más débil, ante el avance de la cosecha brasilera, que genera mayor interés de la demanda china es desmedro de la estadounidense. A eso se suma el panorama despejado en chacras, camino y rutas hacia los puertos. Fluye el producto, llevándose puesto al precio, pero en Brasil ni se enteran de eso, devaluación mediante.
El trigo rompió la tendencia alcista que lo acompañó durante las cinco sesiones previas. Pronósticos de nuevas lluvias están trayendo algo de tranquilidad a los Farmers, mientras que también al mercado, por lo que se desentiende del precio. Anteriormente, vio nuevas subas en el electrónico, impulsado sucesivamente por ventas de cobertura y compras de oportunidad por parte de los fondos. Existe inquietud en EEUU, ante la incipiente falta de agua en algunas zonas de las Planicies trigueras, sobretodo considerando un producto ya de por sí caro frente a sus competidores debido al precio alto del dólar.
Fuente: FIMIX – Agrofinanzas