Con un 2020 cargado de desafíos, el presidente de la Asociación de Criadores de Brangus del Paraguay, Joaquín Clavell, conversó con Valor Agro sobre el momento de la raza en el país y su evolución, además aseguró que el Brangus paraguayo construyó su propia identidad y es un material de mucha calidad, adaptado y probado en el medio que está siendo muy demandado por productores locales y regionales.
– En un año muy atípico, ¿cómo se adaptó la Asociación para generar instrumentos útiles para los criadores de la raza?
– Ha sido un año que quedará marcado en la historia a nivel país y mundial, la pandemia llegó para instalarse y nos obligó a trabajar dos o tres veces más de lo que se venía haciendo de forma normal: nos sacó de la zona de confort y nos revolucionó. La situación nos llevó a ser creativos para reacomodar la estructura de la Asociación, y los resultados fueron muy buenos. El balance global es positivo, independientemente de los duros golpes que recibieron los productores durante el año con la sequía, los incendios y una fluctuación de precios a la que no estábamos acostumbrados. Desde la Asociación, con más de 450 socios activos, tenemos el deber de guiar por dónde vamos a transitar y quisimos marcar un camino que se terminó haciendo tendencia en el mercado paraguayo.
– A pesar del rediseño de las actividades, ¿qué puede decir de los productos que los criadores presentaron en los evento de la raza?
– Que la raza está muy fuerte. El esfuerzo mancomunado entre los productores y la Asociación permitió el éxito que se logró en cada una de las actividades que se realizaron con materiales en pista de excelente calidad, en un momento muy particular.
– ¿Hoy se cuenta con el Brangus que se necesita en el país?
– Sí. El Brangus es una herramienta de trabajo, y si ésta da frutos a nivel productivo y comercial, al momento de la venta de genética y a los frigoríficos, se puede decir que se tiene una plusvalía con un material genético que está muy arraigado en el país. Entonces, la raza y la Asociación están fuertemente posicionadas a nivel país y quedó demostrado en cada una de las actividades que se desarrollaron: con eventos que marcaron tendencia, precios altos y clientes que no dejaron de invertir en genética.
– Por cómo se ha venido trabajando, ¿considera que en el país hay un Brangus con identidad nacional?
– El Brangus de Paraguay tiene su identidad propia, que desde hace un tiempo se mira desde afuera y ya empezó a traspasar fronteras. Pero no podemos desconocer que se importó mucha mercadería y en base a eso se construyó lo que hoy tenemos, más de 37 años de trabajo con parámetros bien marcados por la Comisión Técnica. Lo interesante es que desde el inicio hasta hoy la Asociación siempre mantuvo su norte, con una línea trazada que fue la de implantar la raza, una marca que al productor realmente le sirva y sea un material comercial que funcione. Y prueba de esto es que desde el sur de Pilar al norte de Alto Paraguay hay animales Brangus en forma productiva: es una raza muy plástica en cuanto habilidad materna, muy buenos números de producción y calidad de carne; puntos que son el principal éxito de otros factores que también inciden para que una raza se implante y tenga la fortaleza que hoy tiene.
– Más allá de los problemas coyunturales, como el clima, la pandemia y la demanda de carne de los mercados; en lo estructural, ¿hacia dónde tiene que ir el nuevo Brangus?
– Siempre hay que corregir detalles, el Brangus todavía tiene un techo muy alto y estamos lejos de la cúspide, pero estamos tratando de llegar ahí con correcciones que se van concretando en la medida que vayan siendo necesarias. El potencial de la raza a nivel nacional es muy grande, y siempre está el apoyo de la Asociación y los productores para tomar decisiones acertadas. Lo fundamental es que el Brangus ya está instalado, listo para quedarse y perdurar por mucho tiempo más.
– ¿El Brangus paraguayo es cada vez más visto como una opción de mejoramiento genético de calidad por los productores de la región y de otras partes del mundo?
– Sí, totalmente. Hoy estamos en competencia con los países vecinos, se habla mucho de la evaluación del Brangus de Paraguay y haber logrado el mejor ejemplar de la raza a nivel mundial suena muy fuerte y es el espejo del constante trabajo de los criadores nacionales. Hoy hay toros nacionales que están en centros genéticos de países vecinos: ese material que tal vez los abuelos fueron importados, hoy están yendo a mejorar los planteles vecinos, lo que indica que Brangus nacional va por muy buen camino. Ya no hay mucho que envidiar al Brangus de otros países, porque si esos países están llevando nuestro Brangus es por algo.
– ¿Existe una apuesta de la Asociación para que el productor que demanda toros comerciales piense siempre en reproductores nacionales?
– Como Asociación seguimos apuntando a que se apueste a lo nuestro, estar implantados como raza y como material, que nosotros utilicemos las líneas que producimos. En cuanto a la demanda, la aceptación por el Brangus es altísima, se está muy bien posicionado en relación a otras razas. Manejamos indicadores que lo demuestran: como los precios promedios de comercialización, la presencia en la faena de los frigoríficos, la demanda de toros en ferias o en los propios campos; esta última opción representa un porcentaje muy alto de los productos que se negocian en el año.
Fuente: Valor Agro.
