El ministro de Industria y Comercio, Javier Giménez, destacó en el Congreso CEA la importancia de fortalecer la confianza entre productores e industria para superar los desafíos actuales del sector ganadero. Además, señaló la necesidad de mayor transparencia en los procesos de faena y compra, así como de recursos para abrir nuevos mercados, en un esfuerzo por mejorar la rentabilidad del rubro.
Durante su discurso expresó que el MIC siempre ha mantenido el mismo espíritu que los fundadores del CEA hace 50 años. “Tranqueras abiertas, recibiendo a todos los productores para escuchar sus reclamos, basarse en la ciencia y en la práctica empírica, con el fin de trabajar en conjunto para solucionar el problema del bajo precio, que está afectando la competitividad y rentabilidad del negocio, lo cual se refleja en el decrecimiento del hato ganadero”, apuntó.
Añadió que esa es una realidad, pero se debe regresar a los principios de los fundadores del CEA: la construcción de confianza. “En una de mis reuniones mencioné que tal vez debamos hacer un rebranding, un cambio de nombre al Instituto Paraguayo de la Carne, para eliminar el temor infundado de que el IPC está relacionado con algo que ya está totalmente descartado: la interferencia y regulación de precios”, puntualizó.
Indicó que, en la relación de oferta y demanda, siempre existirá “ese conflicto natural que es la negociación entre quien entrega su novillo gordo para vender y la industria que lo compra”.
Señaló que, si se logra afrontar esta situación con un alto grado de madurez, se podría eliminar esa discusión de la mesa y concentrarse en dos aspectos principales: primero, una mayor transparencia en los procesos de faena y compra, con reglas de juego claras; y segundo, en la generación de recursos disponibles para competir en los mercados.
“Alguien mencionó lo que Australia invierte anualmente en la promoción de su carne; no recuerdo la cifra exacta, pero el Ministerio de Industria y Comercio, a través de su Viceministerio Rediex, que se encarga de la atracción de inversiones y del fomento a la exportación, dispone de un presupuesto de solo dos millones de dólares donados por el gobierno de Taiwán”, señaló.
Agregó que el viceministro de Rediex “sufre personalmente la falta de recursos” para competir en mercados como los del sudeste asiático, donde en seis países no se dispone de embajadas.
“Celebramos en Paraguay los bajos impuestos, se han eliminado las tasas consulares, pero de la noche a la mañana, los ingresos de la Cancillería cayeron un 50%, esa es nuestra realidad. Ahora tenemos la oportunidad, y es la posición del Ministerio de Industria y Comercio, de acercar a la cadena de valor y decirle a la industria, públicamente, que debemos quitar ese temor de la mesa”, sostuvo.
Para el ministro, es necesario “quitar ese temor que los distancia (productores e industria)”, y enfocarse en una agenda de temas que unan y beneficien a las partes, “como una mayor transparencia y la generación de recursos para abrir nuevos mercados y mejorar los precios, lo cual repercutirá en el productor”.
Indicó que esto es un proceso de construcción que puede durar 14 años, pero no se debe claudicar, sino seguir insistiendo en la construcción de confianza.“Debemos tener la agallas y el tesón necesarios para continuar en esta carrera, que, como alguien dijo, es una maratón y no una carrera de 100 metros”, concluyó.