El contexto productivo y comercial para la agricultura promete con buenos rendimientos y excelentes precios, frente al histórico de los últimos diez años, para potenciar la economía paraguaya con ingresos estimados por encima de los 3.500 millones de dólares.
Sin embargo, el bajo nivel de agua de los ríos Paraguay y Paraná está dificultando la logística de los granos. “Desde el año pasado hay dificultades en los ríos, las barcazas están viajando con media carga o un poco más, pero nunca completas; a tal punto que hay cerca de un millón de toneladas que están paradas”, aseguró a Todo a la Parrilla Héctor Cristaldo, presidente de la Unión de Gremios de la Producción (UGP).
Explicó que “el año pasado se hizo un esfuerzo con las dos administraciones de las represas binacionales para liberar un caudal de agua adicional en el río Paraná, que está atravesando el problema más crítico y hoy tiene cargas paradas”.
Cristaldo afirmó que “es fundamental el dragado de los ríos”, pero “hay muchos cruces de intereses para la habilitación de presupuestos para el inicio de esos trabajos”, que “son claves para mejorar la competitividad del país y la fluidez de las exportaciones”.
El dragado de los ríos “es un tema que se está discutiendo” y cuenta con el apoyo de los gremios productivos. “No es un proceso corto, pero se necesita un programa con una visión de mediano y largo plazo para ir superando las dificultades y tener previsibilidad para una buena administración de los tiempos y flujos”, añadió Cristaldo.
Y agregó: “Sin plan de acción, el sector agrícola, que genera ingresos por US$ 3.500 millones, está dependiendo de la suerte climática para que las lluvias carguen los ríos, que son las vías de transporte para la salida a ultramar”.
Campaña. El Presidente de la UGP afirmó que a pesar de la pandemia el campo no paró y está permitiendo apalancar la economía. “El campo salvó el año económico”, dijo y agregó: “En 2021 no vamos a alcanzar la superproducción del 2020, pero el volumen sería cercano a los 10 millones de toneladas”.
Cristaldo consideró que “es un buen número para lo que se esperaba en rendimientos”, además señaló que los precios de ventas “dan oxígeno financiero” a los productores, luego de diez años donde se vieron obligados a dos refinanciaciones.
Dijo que un 30% de la pre venta se concretó a US$ 300 a US$ 350 por tonelada, otro 30% a US$ 350 a US$ 400 por tonelada y el 40% restante por encima de los US$ 400 por tonelada. “Es un muy buen precio en relación a los US$ 250 a US$ 260 que se obtuvieron en la campaña anterior”, subrayó.
Fuente: Valor Agro.
