En el norte del Departamento de Alto Paraná los productores esperan que ya no llueva. El motivo es que los cultivos de trigo ingresaron en la delicada etapa de formación de espigas, informó Paulo Roberto Gregory, presidente de la Cooperativa de Producción Agroindustrial Santa María, Coopasam.

“Las variedades tempraneras se enfermaron por las lluvias y no queremos que esto se expanda al resto del área”, dijo.

Hasta el momento el 5% de la superficie triguera de esa región presenta dificultades sanitarias, por lo que a su criterio no es motivo de preocupación. La Cámara Paraguaya de Exportadores y Comercializadores de Cereales y Oleaginosas (Capeco) y el Instituto de Biotecnología Agrícola (Inbio) instaron a realizar aplicaciones con fungicidas para controlar el brote de enfermedades, bacterias y hongos en los cultivos agrícolas.

“El bajo precio del trigo es un inconveniente pero tenemos en cuenta que necesitamos hacer una rotación después de la soja zafriña”, explicó Gregory.

Estimativamente, los socios de la cooperativa Coopasam sembraron este año 13.000 hectáreas de trigo, superficie similar al año pasado. A pesar de los problemas climáticos, en Paraguay no está en riesgo el abastecimiento interno de trigo, pero afectará la calidad.

Fuente: ultima hora