La trazabilidad fue nuevamente discutida en el segundo día del evento World Agri-tech South America Summit, en São Paulo. “Hay mucho debate sobre la trazabilidad, poca conclusión y poca forma de monetizar y, por tanto, las industrias, los productores y toda la cadena acaban siendo penalizados”, afirmó el presidente del consejo de administración de JBS, Jerry O’Callaghan.
A diferencia del director financiero de Minerva Foods, Edison Ticle, O’Callaghan afirmó que el principal obstáculo para la trazabilidad no es el gobierno, sino la legislación. Ticle señaló en un panel en el evento celebrado hoy que este desafío se debe a un “monopolio del Ministerio de Agricultura, que trata la información como el equivalente al secreto bancario”, dijo.
Para el ejecutivo de JBS, sin embargo, «el gobierno, de hecho, tiene las manos atadas por la legislación», añade. Para él, la ley brasileña, acercándose a la estadounidense, prioriza la privacidad, no permitiendo la divulgación de informaciones, incluso por parte del Ministerio de Agricultura, sobre proveedores intermediarios. La industria, a su vez, “pide información desesperadamente”, añadió.
Sin embargo, O’Callaghan dice que no importa lo que haga la industria, se equivocará, ya que se encuentra entre la privacidad y la transparencia. Además, el ejecutivo señaló que la información sobre el transporte de animales por sí sola no sería suficiente, ya que no es capaz de dar fe de la sostenibilidad y las condiciones de vida de los rebaños en los proveedores intermediarios.
El presidente del consejo, que es irlandés, recordó que, en el último siglo, en su país de origen, los agricultores recibían subvenciones por el rastreo de animales, como forma de evitar el contacto con animales con enfermedades transmisibles, como la enfermedad de las vacas locas.
Tal comportamiento justificaría la tendencia europea a buscar más información, mientras que los estadounidenses, que tienen una ganadería más intensiva, priorizan los aspectos financieros y la privacidad de la información. O’Callaghan también señaló que además de la trazabilidad, hay otras iniciativas a observar para un enfoque de sostenibilidad en la cadena productiva ganadera.
El ejecutivo citó la necesidad de realizar investigaciones para comprender los ciclos atmosféricos y cómo se procesan las emisiones de metano y CO2, en busca de círculos virtuosos. Además, la investigación genética “aún no ha llegado, pero no debemos subestimarla”, con las carnes de laboratorio como una posibilidad para una producción cárnica sostenible.
“Esta investigación está en el radar de JBS, porque debemos pensar no sólo en el presente, sino también en los próximos cinco y diez años”, añadió.