Brasil, Uruguay y Bolivia se adhirieron al reclamo de Paraguay hacia la Argentina que tiene como objetivo no aplicar el cobro del peaje para la navegación que afecta al transporte fluvial nacional. Esta postura se dió en el marco de la LVII Reunión de la Comisión del Acuerdo de la Hidrovía Paraguay-Paraná que solicitó Paraguay de carácter urgente.

Estos tres países forman parte del acuerdo de Santa Cruz de la Sierra y brindaron su apoyo a la delegación paraguaya luego de que la misma haya expuesto los efectos negativos que la medida unilateral argentina representaría al comercio exterior paraguayo y a la vez, los efectos negativos que dejaría en la competitividad del transporte fluvial para el acceso a los mercados de ultramar.

En la ocasión, la delegación del Paraguay reiteró su rechazo a las disposiciones administrativas dictadas por el Ministerio de Transporte argentino (resoluciones número 625/2022 y 1023/2022), en atención a las disposiciones comunes vigentes del Acuerdo de Santa Cruz de la Sierra, que precautelan la libertad de navegación y de tránsito por la Hidrovía de las embarcaciones, bienes y personas de los países signatarios.

Estas disposiciones establecen, entre otras cosas, que sólo podrá cobrarse tasa retributiva de los servicios efectivamente prestados, sin discriminación a causa del origen de la carga de los puntos de partida, de entrada, de salida o de destino o de cualquier circunstancia relativa a la propiedad de las mercancías, de las embarcaciones o de la nacionalidad de las personas.

De igual manera, la delegación Argentina mantuvo su posición pese a las consideraciones expuestas y no acompañó la propuesta consensuada por los demás Estados signatarios, no obstante, se comprometió a proveer la información que sea solicitada por los países partes, posibilitando la continuidad del diálogo en las instancias técnicas.

En tanto, Bolivia, Brasil, Paraguay y Uruguay consensuaron convocar el “Grupo de trabajo para el estudio de obras de dragado en la Hidrovía”, de tal modo a continuar con un diálogo regional sobre esta materia y avanzar en el intercambio técnico necesario para ponderar la pertinencia de las medidas administrativas citadas.

Así también, verificar el nivel o alcance de eventuales servicios prestados en el tramo de afectación, en consonancia con los objetivos trazados por el Acuerdo de la Hidrovía Paraguay-Paraná.