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Resulta natural que los animales mueran cuando no tienen agua

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Resulta natural que los animales mueran cuando no tienen agua

Para el MOPC es natural que en esta época mueran animales silvestres en la zona del Pilcomayo. Lógico, cualquier ser vivo fallece al no consumir agua. Esta sequía representa el fracaso de su gestión.

El ministro de Obras Públicas, ingeniero Ramón Jiménez Gaona, aseguró a los medios de prensa que “la mortandad de animales es un proceso natural y no existen indicios de que haya habido una situación que supere a los procesos naturales del Chaco paraguayo”.

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Las declaraciones las dio con relación a la mortandad de animales silvestres en la zona del Pilcomayo, y se publicaron en la edición de la víspera del diario Última Hora, página 16.

Según el medio colega, el ministro de Obras Públicas agregó que “estamos viendo un ciclo normal en el río Pilcomayo”.

Tiene razón: los animales están muriendo en forma natural en el Chaco.

El río Pilcomayo no ingresó en nuestro territorio por ineficiencia del Ministerio de Obras Públicas y la comisión nacional. Sin agua ni alimentos es absolutamente natural que los animales mueran. Si tuvieran agua, el Chaco no estaría sufriendo estragos tal como sucede.

El titular del MOPC y el director de la Comisión Nacional del Pilcomayo, ingeniero Óscar Salazar Yaryes, insisten en que el río llegó hasta el fortín General Díaz. Repiten que se logró recuperar las aguas gracias a trabajos realizados el año pasado, en la limpieza de la embocadura.

El río no se recuperó, las aguas no llegaron a General Díaz y en Argentina hay suficiente agua. Ambos mienten al decir que no hubo agua suficiente en el Pilcomayo, Paraguay no recibió agua que es muy diferente. El bañado La Estrella (Formosa) está rebosante.

El fracaso. En la zona de Margariños, 140 kilómetros al norte de General Díaz, el río se escurrió a lo largo de 8 días, una semana después dejó de correr. Tener agua 8 días no es recuperar el Pilcomayo.

La Comisión Nacional del Pilcomayo fracasó en el objetivo de tener nuevamente las aguas del río en nuestro territorio.

El ingreso de aguas entre los meses de diciembre y marzo permite contar con reservas suficientes para los meses de invierno. Esos 5 meses en que se registran repuntes de caudal, en coincidencia con la temporada de lluvias en el Chaco, son suficientes para soportar la temporada invernal.

Paraguay no tuvo al río en el verano, por lo tanto carece de reservas suficientes para el invierno.

Riesgo para el 2018. Para colmo de males, todo indica que el año próximo es muy probable que tengamos el mismo problema: los trabajos de rehabilitación del canal paraguayo comenzarán tarde y el tiempo disponible se extiende hasta diciembre, porque luego comienza el tiempo de lluvias.

El Ministerio de Obras Públicas, responsable de administrar los fondos para la comisión nacional, no previó el llamado a licitación con antelación; de nuevo retrasos para limpiar cauces que permitan el escurrimiento del río en nuestro Chaco.

El resultado de la ineficiencia de la gestión gubernamental tenemos a la vista: muerte de animales silvestres y graves problemas de aprovisionamiento de agua para las unidades productivas de la región.

Fuente: ABC