En un campo de Santiago, Misiones, se experimentó una difícil situación productiva con la presencia de garrapatas en la hacienda bovina, un hecho que no escapa de otros productores de la zona y de cualquier otra región de Paraguay que se quiera pensar en este momento.
Y en tiempos donde hay otras variables que nos quitan la atención, como la volatilidad de los mercados, los mayores costos, la falta o los excesos de lluvias; descuidar la sanidad del campo por algunos días puede ser tiempo suficiente para que la garrapata se continúe multiplicando.
“Hay veces que no podemos estar con la atención al cien por ciento en un tema del campo, porque quizás llueve y no podemos entrar o el equipo no puede juntar el ganado y llegar a las mangas; pero una sanidad que se dilate 5 días, donde la garrapata tiene un ciclo de 21 días, no intercedes correctamente y este problema se sigue reproduciendo en el establecimiento”, comentó a Valor Agro el Dr. Fernando Antúnez, director de Coronado SA.
Antúnez contó que antes de cerrar el año estuvo recorriendo varios campos en Paraguay, y uno de ellos en el departamento de Misiones donde se venía acarreando una problemática con la garrapata.
“No era un tema de resistencia al cien por ciento, también estaba involucrado el mal uso de productos, la práctica de los productos y, además, la falta de un asesoramiento más específico”, apuntó.

Ganado limpio de garrapata luego del tratamiento.
Antúnez, que suma varios años de experiencia como médico veterinario y trabajando contra la garrapata en Uruguay y otros países de la región y América Central, contó que acordaron visitar el campo, recorrer los potreros y evaluar la situación de los animales: “Estuvimos todo un día y sobre el escenario del momento, arrancamos un plan sanitario de ataque con el uso de diferentes drogas”.
Explicó que la idea fue fácilmente acompañada por el productor y su equipo de trabajo, quienes apoyaron y se alinearon al programa para combatir la garrapata.
“Usamos todas las drogas que tenemos disponibles de Cibeles, la aplicamos en cargas altas en diferentes potreros y todo tipo de hacienda”, dijo Antúnez.
Sin embargo, remarcó que la única droga que no se utilizó fue el Cipermetrina y Ethion, dado que ya la venían usando hace mucho tiempo en el campo.

Dr. Fernando Antúnez, director de Coronado SA, representante de Cibeles en Paraguay.
Y agregó: “Empezamos un plan de rotación de drogas, luego de haber desparasitado dos veces la hacienda. Y para nuestra satisfacción, en poco más de tres meses el ganado quedó limpio, cambió drásticamente el estado corporal y ganó kilos”.
Fernando Antúnez se demostró “muy contento con el resultado”, dado que el administrador y residente del campo “nos informan sobre la hacienda y nos dicen que ya no hay garrapata en los animales”, si bien sabe que el problema continúa en el campo pero la sanitización limpió todo el ganado.
Finalmente, Antúnez dijo que esta experiencia, más otras vividas en Paraguay, dan la pauta que la garrapata está siempre latente en los campos nacionales. “No nos podemos descuidar, debemos seguir de cerca el problema y hacer tratamiento de control para que en momentos indicados no se nos escape el problema”, apuntó.
Al mismo tiempo, instó a ser conscientes en la aplicación de los productos de acuerdo a las categorías a aplicar, respetando en todo momento los tiempos de espera indicados. “Utilicen buenas técnicas, hagan un buen manejo de productos y trabajen con productos de calidad”, cerró.